Unelco endurece las inspecciones en los locales de Puerto Rico y los comerciantes temen nuevas sanciones de Industria

Actualizado: domingo, 26 agosto 2007 18:00


LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 26 Ago. (EUROPA PRESS) -

La inspección que la empresa Unelco Endesa realiza en todos los locales de las diferentes fases del centro comercial de Puerto Rico ha desatado el temor de los empresarios a sufrir sanciones similares a las impuestas por el Gobierno de Canarias en el bloque tercero del complejo de ocio, cuyos inquilinos y propietarios llevan un mes y medio sin luz tras cortar la Consejería de Industria el suministro eléctrico.

Y es que las anomalías detectadas en la centralización de los contadores de la tercera fase son semejantes a las que existen en la primera. Una de ellas apunta a un consumo superior a la potencia contratada con la compañía suministradora, que es uno de los motivos por los que Industria también ha expedientado a Unelco.

Ahora la compañía ejecuta una campaña de chequeos para verificar que los controladores de potencia (IPC) se corresponden con las cantidades de energía convenidas, pues la mayoría de los comerciantes hicieron en su momento apaños en las instalaciones para poder gastar más electricidad de la autorizada.

Ese exceso en la demanda es una de las causas que han provocado los incendios en las cajas de contadores de la primera y la tercera fase, siendo esta última la más perjudicada porque afectó a la totalidad de los 120 locales. De ahí que Industria decidiera cortar la luz después de conceder un plazo de conexión provisional, que ha expirado sin que los afectados hayan legalizado las instalaciones.

Los cambios de los IPC para consumir más electricidad sin que se salten las palancas han terminado por sobrecargar la red, entre otros motivos porque el cableado no fue convenientemente sustituido y se acabó quemando al no soportar tanta tensión. Esto ocurrió también en el primer bloque comercial, cuyo incendio se produjo en junio del año pasado y afectó a los contadores de ocho establecimientos.

Por el momento las inspecciones han comenzado en los locales de la segunda fase, aunque Unelco ha mandado cartas a la mayoría de los comerciantes, en las que advierte del corte del suministro si la potencia no se ajusta a las limitaciones de los IPC. "Se oyen rumores de nuevos expedientes, aunque a nosotros todavía no nos ha llegado nada", comentaba ayer un empresario, preocupado por el rigor con el que la compañía ha comenzado a revisar las instalaciones. Antes lo hacía una subcontrata.

Ese temor les ha llevado "a trabajar a medias", moderando así el gasto en electricidad para no forzar la situación. También han encargado diferentes proyectos para determinar las necesidades energéticas que requiere el centro comercial, conscientes de que tendrán que adaptar la infraestructura a la normativa de Industria.

Las distintas comunidades de propietarios de cada estación del inmueble, en total cuatro, ya han comenzado a recabar datos para poner en marcha los estudios y comenzar cuanto antes las obras necesarias en las instalaciones. La intención es evitar una sanción que les deje poco margen para reaccionar, que es lo que les ha ocurrido a los compañeros de la tercera fase. Ellos han agotado el plazo otorgado y en la actualidad siguen pendientes de subsanar las deficiencias detectadas para volver a contratar el suministro. Por el momento llevan más de mes y medio sin luz, aunque la revisión que destapó las irregularidades se remonta a mayo del año pasado.