La 'Declaración de Reims' en la AREV defiende las demandas de los vinos de calidad en la aplicación de la OCM

Actualizado: sábado, 31 mayo 2008 14:31

LOGROÑO, 31 May. (EUROPA PRESS) -

La 'Declaración de Reims', acordada en la XVI Sesión Plenaria y XXIII Consejo Internacional de la Asamblea Europa de Regiones Vitivinícolas (AREV), defiende las demandas de los vinos de calidad en la aplicación de la OCM, en coincidencia con las tesis argumentadas en todo momento por el Gobierno de La Rioja, según informó el Ejecutivo riojano, en un comunicado.

En este sentido, la AREV -partidaria del principio de subsidiariedad- invita a los Ministros de Agricultura a vigilar muy especialmente la transposición que realice la Comisión del acuerdo político logrado por ellos y a no dejar que se registren orientaciones o disposiciones irrevocables en dirección contraria al acuerdo político. Todo "en favor de una correcta y adecuada aplicación de tan importante regulación para los intereses de las regiones vitícolas europeas, especialmente con respecto a las más tradicionales y de producción cualitativa".

Dicha Declaración se adoptó ayer en una jornada de trabajo en la que estuvo presente el consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Íñigo Nagore, en representación de La Rioja. En esta cita, la Asamblea abordó aspectos como el balance de actividad 2007, el borrador de Presupuesto para 2008, la presentación de nuevos miembros, elección del nuevo presidente -en la persona del francés Jean Paul Bachy, de la región Champagne Ardenne- y de otros cargos de la Asamblea; así como una serie de comunicaciones centradas en la aplicación de la OCM y las perspectivas de la viticultura europea.

POSTURAS AREV.

Dentro del contexto de la importancia del sector vitivinícola en Europa, con un peso económico considerable y cuyas actividades marcan de manera determinante a las regiones, la AREV reafirma, en la 'Declaración de Reims', las posturas siguientes de recordar "su oposición", al tiempo que ruega a los Estados miembros que "no deliberen y resuelvan sobre la supresión del sistema de los derechos de plantación hasta recibir el informe evaluador fijado para el año 2012".

La AREV, afirmó que "siempre se pronunció en contra del hecho de mencionar la variedad y añada sobre las etiquetas de los vinos de mesa, puesto que la medida resultaría contraria a los esfuerzos cualitativos deseados por la propia comisión, con el consiguiente riesgo de confusión para el consumidor".

Por ello, se solicita a los Estados Miembros y a la propia Comisión la "vuelta a la reglamentación anterior" y que, cuando menos, se controle "rigurosamente" la autenticidad de las indicaciones y que examinen con mucha atención la incidencia de este sistema sobre los vinos con D.O. y, en su caso, modificar dicha resolución.

La AREV señaló que las prácticas enológicas que forman parte de la tradición vitícola representan una "fortaleza" sobre el mercado. La autorización de prácticas nuevas sólo resulta lícita cuando éstas representan un interés general para los productores como para los consumidores. "No deben, en absoluto, ser modificadas conforme a las conveniencias de grupos de presión". Las competencias deben corresponder al Consejo de Ministros.

La Asamblea de Regiones Europeas Vitivinícolas reafirma que el programa de arranques "no debe conllevar la desaparición de viñedos históricos de gran importancia paisajística, socioeconómica y de destacada biodiversidad, especialmente en zonas de elevada pendiente, ya que podría destruirse la especificad de territorios enteros".

Por ello, la AERV pide a la Comisión que acepte, de conformidad con el principio de subsidiariedad, "los modos de medición de las superficies vitícolas vigentes en los Estados Miembros. Un nuevo sistema conllevaría una deriva burocrática inaceptable y elevados costes, sin hablar del riesgo de que sean directamente inducidos nuevos derechos de plantación".