CALAHORRA (LA RIOJA), 30 Nov. (EUROPA PRESS) -
No más de una docena de personas convocadas por la formación política RTS Heogalde componían la manifestación, en solidaridad con los presos de Alsasua y Cataluña, que ha recorrido esta mañana la calle Bebricio de Calahorra y que ha tenido una respuesta de rechazo inesperada con unas 500 personas que portando banderas españolas les han rodeado e increpado en todo momento.
Antes de las 10 de la mañana un buen número de efectivos de los GRS5 (Grupos Rurales de Seguridad) llegados de la provincia de Zaragoza han estacionado sus vehículos, junto a la plaza de toros, frente al aparcamiento del Silo, lugar en el que poco después comenzaría la manifestación. Por su parte, agentes de la Policía Local se encargaba de regular el tráfico y establecer controles complementarios de seguridad y apoyo. Un helicóptero de la Guardia Civil patrullaba desde el cielo.
Sobre esa hora han comenzado a llegar contramanifestantes portando, mayoritariamente, banderas españoles constitucionales que se han ido aglutinando en las aceras de la aledaña calle Bebricio.
El presidente de RTS Heogalde, Ángel Vegas, ha hecho una serie de manifestaciones minutos antes de comenzar su marcha: "El motivo de la manifestación es por el problema catalán que es fundamentalmente político".
"La manifestación quiere desencallar la política española -ha seguido diciendo Vegas-. Se está provocando una división peligrosísima y creíamos que teníamos el deber para con España y con los catalanes de hacer esta manifestación pacífica. La opción más democrática, pacífica y constitucional es el diálogo y mediante pactos crear un gobierno de coalición que pacte una solución para Cataluña. En cuanto a lo de Alsasua, sí creemos que fue una pelea de bar y aunque sí fue porque eran guardias civiles, fue una pelea de bar sin más. Realmente donde se está agrediendo a la Guardia Civil y a la Policía es en otros sitios donde se les dispara, se les atropella".
Los principales representantes, incluidos Montse Ortega de Omnium Cultural, portaban una pancarta en la que se podía leer "RTS Heogalde por una mesa de diálogo. Por Catalunya y solidaridad con los jóvenes presos de Altsasu. ¡Libertad!" Tras ellos marchaban unos jóvenes que portaban una bandera negra.
INCREPADO E INSULTADO
Desde el principio de la marcha, en la que han participado unas 12 ó 14 personas por parte de los convocantes, una airada contramanifestación ha rodeado a los de Heogalde con una sección más dura que abría la marcha caminando de cara a los manifestantes y que les han increpado e insultado durante todo el recorrido hasta la glorieta de Quintiliano.
El gran despliegue policial ha impedido que las cosas pasaran a mayores pero algunos efectivos de la policía reconocían que la respuesta a la contramanifestación ha superado lo que era esperable. En cualquier caso, los medios policiales, que en un principio parecían sobredimensionado ha sido suficiente para evitar altercados mayores.
Una vez en la glorieta de Quintiliano estaba previsto que RTS Heogalde leyera un manifiesto, pero el griterío de los contramanifestantes y el ambiente no lo ha hecho recomendable ni posible.
Posteriormente los manifestantes, ya por la acera, se han dirigido hacia sus vehículos estacionados en las cercanías del aparcamiento del Silo pero quienes les han salido al paso los han acosado constantemente y a pesar de que las fuerzas del orden han tratado de impedirlo, han llegado a golpear los vehículo con fuerza.
Todo ha acabado sobre las 10,45. Los contramanifestantes se han disuelto y la Guardia Civil ha abandonado la ciudad entre aplausos del público.
