MADRID, 29 Oct. (EUROPA PRESS) -
El conserje y los vecinos de un edificio situado en el paseo de las Delicias de Madrid, en el distrito de Arganzuela, rescataron el pasado viernes a dos perros que fueron abandonados por su propietario durante dos meses, por lo que vivían "entre un insoportable olor a heces y orín", según explicó hoy a Europa Press el portavoz de la asociación 'El Refugio', Nacho Paunero.
Los perros, un setter irlandés de siete meses llamado 'Guille' y una pointer de seis meses que responde al nombre de 'Mafalda', "se encontraban muy débiles, apenas ladraban y pudieron sobrevivir porque un vecino les había estado alimentando por el balcón de la vivienda utilizando una barra metálica y unos cubos de plástico", según explicó Paunero.
Según el portavoz de la asociación, el rescate pudo llevarse a cabo "gracias a la tenacidad de conserje y de los vecinos del inmueble, que llevaban meses denunciando los hechos". Cuando acudió a la vivienda una patrulla de la Policía Nacional, comprobó que ésta se encontraba destrozado y repleta de excrementos y orines.
ANSIEDAD Y PÉRDIDA DE PESO
María Pérez, veterinaria de 'El Refugio', explicó que tanto 'Guille' como 'Mafalda' fueron hallados en "un estado de ansiedad absoluto y con síntomas de caquexia". Los animales, que carecían de microchip de identificación, también habían perdido peso, lo que, según Pérez, "podría influirles en su normal crecimiento, ya que su edad no sobrepasa los siete meses de edad".
Paunero indicó que 'El Refugio' ya ha denunciado los hechos en los Juzgados de Plaza de Castilla y que pondrá "todos los medios" a su alcance para "sacar a delante a Guille y Mafalda y, cuando estén totalmente recuperados, buscarles una familia que los quiera adoptar".
Milagros Lorente, responsable del Departamento Jurídico de 'El Refugio', señaló que casos como éste podrían constituir "un presunto delito de maltrato a los animales domésticos, tipificado en el Código Penal". Asimismo, señaló que también podría existir "una presunta falta de abandono", también tipificada legalmente, así como "numerosas infracciones administrativas" a la Ley de Protección Animal de la Comunidad de Madrid.
