El Ayuntamiento ha limpiado, reconstruido y cambiado de emplazamiento 50 chabolas de la Cañada tras las inundaciones

Actualizado: viernes, 31 octubre 2008 20:00

Está llevando a cabo labores de desratización, retirada de agua y limpieza de choque, además de un censo, durante el mes de septiembre

IU reclama la instalación de equipamientos temporales en la zona que garanticen los servicios básicos a sus habitantes

MADRID, 31 Oct. (EUROPA PRESS) -

El Ayuntamiento de Madrid ha limpiado, reconstruido y cambiado de emplazamiento 50 chabolas de la Cañada Real Galiana durante el mes de septiembre, desde que se produjeron las primeras inundaciones en la zona a raíz de las intensas lluvias, según informó hoy la delegada de Familia y Servicios Sociales, Concepción Dancausa, en el Pleno celebrado hoy en la Casa de la Villa.

En respuesta a una pregunta de Izquierda Unida acerca de la intervención social llevada a cabo en la zona por el Consistorio, Dancausa indicó que entre el 5 y el 10 de septiembre Cruz Roja llevó a cabo un censo para conocer la población fluctuante que viven en la Cañada, resultando que en el Gallinero viven 78 familias y 194 menores.

Además, tras las riadas del 22 de septiembre, el Gobierno local llevó a cabo labores de limpieza, reconstrucción y cambio de emplazamiento de 50 chabolas afectadas, y puso en marcha un dispositivo de intervención "continuada e intensiva" del Samur Social.

Los bomberos municipales también intervinieron para retirar agua el día 26, y el 27 hubo diferentes acciones de limpieza de choque. Dos días más tarde se instalaron dos contenedores de basura en la Cañada y el pasado 2 de octubre se desratizó de nuevo todo el barrio. Además, representantes del Ejecutivo local han mantenido "reuniones constantes con las organizaciones de la Cañada", según aseguró la delegada.

En cualquier caso, estas medidas de urgencia son independientes de las acciones que de manera habitual llevan a cabo en la Cañada los servicios sociales de Villa de Vallecas, la Asociación Andaira, el Samur Social, Cruz Roja, varios educadores, Cáritas y responsables del proyecto APOI y personal sanitario. "También colaboramos con voluntarios de la parroquia de Santo Domingo de la Calzada", apostilló la edil.

LABORES HABITUALES

Así, regularmente hay dos trabajadoras sociales en la zona que trabajan con la familia e intentan educar contra el absentismo escolar. Según los datos del Ayuntamiento, "de los 51 niños escolarizados, sólo 20 acuden con regularidad a clase". Además, según Cruz Roja de los 194 menores de 17 años que hay, 48 están escolarizados y 93 no lo están.

En cuanto al Samur Social, "hacen un seguimiento periódico del asentamiento por su carácter marginal y respuesta a emergencias como incendios, desalojos o inundaciones", si bien Dancausa apostilló que "esta población suele mantenerse aislada y es poco receptiva a las propuestas de intervención social, por lo que el trabajo resulta muy complicado".

"Esta población acepta ser atendida fundamentalmente cuando se producen situaciones de emergencia, como las lluvias de las últimas semanas, si bien apenas ningún afectado de la zona aceptó las alternativas de alojamiento que se ofrecieron, y sólo ocho familias y 25 menores siguen alojados en los centros de acogida del proyecto APOI", ejemplificó la popular.

Otras actuaciones que se llevan a cabo en la Cañada por iniciativa municipal son las labores de favorecimiento de la escolarización y las de promoción de la alfabetización de las mujeres gitanas, así como un grupo de clases de español con mujeres magrebíes, que realiza la Asociación Andaira.

INTERVENCIONES DE CHOQUE

Además, Dancausa aportó datos sobre las dos intervenciones de choque realizadas, respectivamente, en junio y en septiembre de este año. Durante el primero de dichos meses, se tomaron medidas para mejorar la salubridad y la atención a los menores, garantizándoles vestido, calzado, atención sanitaria o escolarización. También se desratizó, se llevó a cabo una limpieza de choque, se retiró la basura periódicamente y se puso a disposición de los drogadictos de la parroquia medios de intervención paliativa.

En septiembre, por su parte, se actuó para tratar el absentismo escolar en colaboración Cruz Roja, mientras que junto con la Comunidad de Madrid se puso en marcha el pasado día 22 un colegio en el barrio de Latina para los niños de la zona, a quienes se imparten pautas de higiene, alimentación, relaciones, juegos y lengua castellana, con el objetivo de que "estén en condiciones de incorporarse a un centro ordinario más adelante", indicó la concejala. También se sigue de manera directa la escolarización, y se proporcionó a los niños equipamiento escolar e higiénico.

En cualquier caso, Dancausa recordó que "cualquier solución integral a este problema pasa por el acuerdo y el trabajo coordinado de todas las administraciones implicadas", es decir, cinco ayuntamientos --Madrid, Getafe, Rivas Vaciamadrid, Coslada y San Fernando de Henares--, el Ejecutivo autonómico y la Delegación del Gobierno.

"Ninguna de ellas por sí sola puede solucionar un problema de tanta complejidad, hay muchos problemas y de gran calado", añadió, subrayando que, en cualquier caso, "el Ayuntamiento lleva tiempo reclamando ese acuerdo", con cartas tanto a la Comunidad como a la Delegación de Gobierno, reuniones, propuestas e información de las medidas tomadas en el marco de las competencias municipales.

Por su parte, la edil de IU Milagros Hernández aceptó que "el Ayuntamiento ha hecho lo que le correspondía al aprobar la propuesta de consorcio y mandando, probablemente, una carta al consejero de Presidencia, Justicia e Interior, Francisco Granados, aceptando la posibilidad de ponerlo en marcha".

"Mi intención (con esta pregunta) no era hablar del tema urbanístico en la zona, y también sé que los servicios sociales de Vicálvaro y Villa de Vallecas intentan atender con sus recursos y posibilidades la situación que hay allí, porque además muchos de los vecinos de la Cañada pagan impuestos y están empadronados", indicó.

Sin embargo, en su opinión "la Administración local está obligada, con acuerdo o sin él, a cumplir su parte de competencias", por lo que "debería haber un programa social, humano y de equipamientos temporales para garantizar la limpieza urbana, la existencia de un Punto Limpio, un dispositivo de emergencias permanente, la atención social con unidades de trabajo, un programa de educación sanitaria y preventiva, y un equipamiento móvil para poner en marcha programas de reinserción social o de educación para adultos", entre otros.