MADRID, 26 Jun. (EUROPA PRESS) - La candidata del PP a la Presidencia de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso, ha tendido de nuevo la mano a Ciudadanos y Vox para alcanzar un acuerdo de gobernalidad, aunque ha rechazado algunas de las propuestas que ha presentado este último partido porque, a su parecer, buscan "regresar". "Tenemos, afortunadamente, en Madrid una sociedad muy avanzada, donde entramos todos, donde hemos vivido con respeto, en diversidad, en pluralidad. Eso tiene que seguir siendo así", ha defendido, en rueda de prensa, después de que Vox pusiese sobre la mesa un documento marco con sus exigencias para prestar sus votos en una futura investidura. Concretamente, la 'popular' ha rechazado las propuestas que no son de "estricta competencia regional", como por ejemplo aquellas relacionadas con la inmigración, así como se ha opuesto a entrar en debates de colectivos, como el LGTBI, que "están superados". "Yo quiero mirar hacia adelante. Quiero ser la presidenta de todos los madrileños, los que están en estos colectivos y los que no. Lo que quiero es que todo aquello que era un debate hace cinco años no se convierta ahora en folclore para dividir", ha remarcado. Según ha defendido, "avanzar en respeto, en diversidad, en acabar con el acoso y con la discriminación" será "un pilar" en su gobierno. Trabajará para todos "independientemente de su orientación, su identidad y su sexo" porque cree que todo lo que sea "regresar" es "un grave error". Pese a estas palabras, ha incidido en que "en líneas generales" pueden entenderse en otros "muchos aspectos". Ayuso sí ve coincidencia en materias como "prosperidad, libertad de educación y pensamiento y en cumplimiento de la legalidad" así como en las ayudas a la natalidad, bajada de impuestos y administración austera. En este sentido, ha incidido en que todo lo que sea "reformar, revisar y mejorar" se puede "dialogar". La 'popular' ha manifestado que siempre han mantenido "absoluto respeto" ante los votantes de Vox, lo que se demuestra con que le cedieron "un puesto predominante" en la Mesa de la Cámara regional. Y, según ha avanzado, pretende hablar con la portavoz de este partido, Rocío Monasterio, "en las próximas horas". Ante la negativa mostrada por Ciudadanos a dar su visto bueno a las reclamaciones de este partido, la candidata del PP ha incidido en que "las negociaciones son siempre así" y que en ellas hay "días buenos y días malos" pero al final lo importante es que se logre un entendimiento. Ha aprovechado para recordar a la formación 'naranja' que son necesarios "los votos de los tres partidos" por lo que es "necesario hablar" entre ellos. "Si Ciudadanos no se sienta con Vox, ya lo haré yo. Pero al final lo importante es que los votantes de Vox también se sientan representados en ese acuerdo. Es normal que sus dirigentes pidan que haya una negociación donde sean escuchados. Yo, desde luego, lo voy a hacer", ha sostenido. RECLAMA FECHA PARA LA INVESTIDURA Además, la aspirante del PP, ha reclamado que se ponga "ya" fecha al Pleno de Investidura, que tiene como día tope el 11 de julio, porque "Madrid no puede pararse, en Madrid no puede gobernar la izquierda". Incide en que los ciudadanos "no pueden esperar más" y en que "ya empiezan" a pedir a los partidos que se pongan de acuerdo. En este punto, ha deslizado que "nadie entiende" que, respecto a las negociaciones, sigan "avanzando, retrocediendo y dando cada día una información distinta". "Si nos vamos a entender, que es lo que parece, y es lo que hemos dicho a lo largo de la campaña electoral, hagámoslo. Prolongarlo no tiene ningún sentido y, por supuesto, llevarlo a septiembre es cuanto menos irresponsable", ha lanzado.