Actualizado: sábado, 11 diciembre 2010 12:00

MADRID, 11 Dic. (EUROPA PRESS) -

El rector de la Universidad Complutense de Madrid (UCM), Carlos Berzosa, ha criticado los sindicatos "gremiales" en los que se conforman colectivos como los controladores aéreos, que se convierten en "grupos de presión" con "salarios excesivos" y las jornadas de trabajo "más cortas de Europa".

En un artículo con fecha 9 de noviembre publicado en la web de la Fundación Sistema bajo el título 'La huelga de los controladores y los sindicatos corporativos', Berzosa se refiere al conflicto de los controladores aéreos que ha derivado en que el Gobierno haya declarado el estado de alarma.

A lo largo del texto, Berzosa hace memoria de la historia de los sindicatos de clase, con "amplia tradición histórica y de lucha ejemplar en los momentos difíciles", y dice que junto a ellos "han surgido sindicatos gremiales, que se consideran a si mismos profesionales y no políticos para defender los privilegios de ciertas capas de trabajadores altamente cualificados".

"Se convierten de este modo en un grupo de presión, que basándose en una posición que hace necesario su trabajo y cuya sustitución resulta casi imposible, van consiguiendo mejoras salariales y de jornada laboral sin que les importe lo más mínimo lo que les pasa a otros colectivos de trabajadores", señala Berzosa, que dice que estos nuevos sindicatos "no quieren mezclarse con los colectivos de trabajadores a los que consideran que tienen un estatus profesional inferior, poniendo de manifiesto su posición clasista".

"No quieren pertenecer a los sindicatos mayoritarios, pues los consideran politizados. Por lo general sus dirigentes son de derechas", añade el rector. En el artículo, Berzosa apunta que "los controladores españoles han conseguido por la vía de la presión, y por lo indispensable que es su trabajo, unos salarios excesivos, los mayores de Europa y unas jornadas de trabajo que son las más cortas de Europa".

Así, tras destacar la labor de muchos de los controladores, cuestiona "las prácticas sindicales que llevan a cabo clasistas e insolidarias" y dice que el abandono de sus puestos de trabajo el 3 de diciembre es "de una gran irresponsabilidad en la que no calcularon los efectos de las acciones emprendidas" y que "las consecuencias que se podían derivar".

"La mayor parte de los ciudadanos, tanto los afectados como los que no, han sabido quienes son los responsables de esta huelga salvaje: los controladores y no el Gobierno", afirma el rector a renglón seguido para decir que "prácticamente toda la sociedad se ha manifestado contra esta acción de los controladores, que no solamente han causado graves perjuicios a las personas y a las familias, sino que han causado un daño irreparable a la economía española, ya de por sí bastante afectada por la crisis".

En este punto, dice que no obstante, "ya se dan casos en los que se quiere responsabilizar al Gobierno por la aprobación de un Decreto el mismo día que comenzaba el puente" y reclama a la ciudadanía que no se equivoque, ya que "independiente de que la acción del Gobierno haya sido equivocada o no oportuna, la responsabilidad no es otra que de los que han llevado a cabo una acción sin respetar las leyes del estado de derecho".

"El Gobierno puede ser criticado pero no responsabilizado", asevera Berzosa, que dice que "si no se está de acuerdo con un Decreto se puede impugnar ante los tribunales de justicia, como hacen en muchos casos CC.OO. y UGT", y que se puede convocar una huelga, pero con "unos cauces legales establecidos".

A su juicio, "no se puede permitir un abandono del trabajo, de la forma en que se hizo", ya que "los afectados no son ricos, sino gente de clases medias y trabajadores que querían disfrutar, en su mayor parte, de unas vacaciones, sin olvidar los casos extremos de enfermedades, funerales..."

"Todo esto es fruto de lo que decíamos anteriormente, las posiciones clasistas e insolidarias, conducen a esto", asegura Berzosa, que pregunta a los que "tanto critican a los sindicatos y tratan de demonizarlos" qué opinan de esto.

"Si lo que quieren son sindicatos de este tipo con los que no es posible negociar, o por el contrario lo importante en una sociedad moderna es que existan sindicatos como CC.OO. y UGT, que sí tienen responsabilidad, pero que saben compatibilizar la lucha con la negociación y el pacto", concluye.