MADRID, 14 Ene. (EUROPA PRESS) -
La primer teniente de alcalde y delegada de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Madrid, Ana Botella, dio "gracias a Dios" por haber "cuidado" de su marido y ex presidente del Gobierno, José María Aznar, durante la campaña en la que ETA hace unos años intentó atentar contra él hasta en tres ocasiones.
En una entrevista con Telemadrid, recogida por Europa Press, la edil popular explicó que Aznar se enteró de los intentos de atentado con misiles por el ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, que le llamó personalmente, y que después de todo, da "gracias a Dios porque ha cuidado" a su marido y a todos los que iban con él en el avión, donde había "un montón de personas".
Preguntado por si tenía presente que podía ser víctima de un acto terrorista, Botella indicó que si bien es verdad que no es "miedosa", la primera vez que su marido sufrió un atentado en 1995, tuvo que "asimilar en ese momento que alguien" quería matar a su pareja. "Pero creo que todos creamos unos mecanismos de autodefensa para aquellas circunstancias con las que nos ha tocado convivir", añadió.
Así, explicó que en ese momento le costó "mucho" asimilar la situación, pero que una vez pasada esa circunstancia, ha convivido con ello "y afortunadamente se te olvida". Sobre cómo se vive en la intimidad una situación de estas características, Botella apuntó que se vive "casi más" al día siguiente de un atentado.
En su caso, consideraron que había sido "un milagro" y aseguró sentirse "afortunada" porque es consciente de que ha habido "muchas personas a lo largo de la historia en la democracia que han muerto como consecuencia de ETA".
"Si me comparo con esas personas, me considero absolutamente afortunada, y aprendes a valorar en la vida lo que realmente importa y esas pequeñas cosas en las que a veces nos preocupamos de forma absurda, tratas de dejarlas en su justo término", añadió.
Preguntada por si considera que Euskadi podría tener un problema menos si los presos etarras hiciesen huelga de hambre hasta el final, Botella señaló que el Estado "no se puede ver forzado por una huelga de hambre". "Hay unas leyes que hay que cumplirlas con independencia de que haya o no una huelga de hambre... hay una legislación que es la que hay que cumplir", concluyó.
