MADRID, 15 Dic. (EUROPA PRESS) -
Los responsables de Inmigración de la Comunidad de Madrid, Castilla y León, Murcia y Comunidad Valenciana se reunieron hoy para denunciar el "fracaso" de las políticas emprendidas en esta materia por el Gobierno central y para denunciar el trato "ofensivo" que, según dijeron, han recibido por parte de la secretaria de Estado de Inmigración, Consuelo Rumí, durante la reunión del Consejo Superior del ramo celebrado hoy.
"El Gobierno continúa con una política de Inmigración inapropiada, con desorden y descontrol, que es lo que menos le conviene a España en un momento de crisis económica", aseguró el consejero madrileño, Javier Fernández Lasquetty, quien apuntó que "bajo ningún concepto" el Gobierno central "debe hacer una política de inmigración sin diálogo ni consenso con las comunidades autónomas como lo lleva haciendo en los últimos cuatro años".
En rueda de prensa conjunta con representantes de Inmigración de Valencia (Gotzone Mora), Murcia (Leopoldo Navarro) y Castilla y León (Félix Colsa), Lasquetty manifestó que el único punto del día que el Ejecutivo central pretendía tratar esta mañana era el contingente de trabajadores extranjeros para el 2009, que finalmente ha quedado fijado en 1.376 personas con la abstención de las comunidades del PP.
A su juicio, el establecimiento de esta cifra es "irrelevante" dado que en 2007, a pesar de que el contingente fue de 27.000 personas, tan sólo 5.700 llegaron por esta vía, mientras que simultáneamente se empadronaron 700.000 nuevos extranjeros. "Estamos en tiempo de crisis económica profunda y en un momento así la principal obligación del Gobierno es reconocer la realidad, que es que el sistema del contingente es un fracaso absoluto que no funciona", sentenció.
Lasquetty indicó que es ahora cuando se están viendo las "peores" consecuencias del efecto "papeles para todos" y puso de manifiesto que en estas circunstancias las personas que se encuentran en situación irregular son las que peor lo están pasando. "La política de Inmigración del Gobierno es equivocada, tiene falta de control y es un desorden", añadió.
ANÁLISIS DEL CONSEJO
A pesar de que el Consejo Superior de Política de Inmigración contaba con un único punto en el orden del día, las comunidades gobernadas por el PP han planteado otra serie de cuestiones que pasan por la reforma de la Ley de extranjería, las intención del Ejecutivo en la moratoria de permisos de trabajo para rumanos y búlgaros, el proyecto de Real Decreto para conceder a algunas regiones autoridad para otorgar permisos de trabajo y el Fondo de Acogida del Ministerio.
El consejero madrileño indicó que el Gobierno de la Nación se había comprometido a tratar con las comunidades autónomas la reforma de la Ley de Extranjería pero, sin embargo, el ministro del ramo, Celestino Corbacho, ya ha anunciado que antes de que termine el año irá al Consejo de ministros.
Según Lasquetty, cuando las comunidades del PP han presentado su quejas por este hecho, Rumí les ha dicho que las consultas a las comunidades autónomas "se harán después" de que la reforma de la normativa haya pasado por el Consejo de ministros. "Esto es algo sorprendente que muestra la falta de respeto a las comunidades, que son las que tienen la competencia en la integración de los inmigrantes. Es un mal procedimiento para hacer las cosas si lo que buscan es consenso", aseveró.
En cuanto a la moratoria de permisos de trabajo para rumanos y búlgaros, que concluye el próximo 31 de diciembre, Lasquetty recordó que las comunidades autónomas han pedido en varias ocasiones que "se escuche su voz" y señaló que las regiones del PP están a favor del levantamiento de la moratoria porque consideran que "es ineficaz", ya que ha duplicado el número de rumanos cuando lo que se pretendía es que se redujera.
Desde su punto de vista, esta moratoria "es injusta" para los trabajadores rumanos y búlgaros que, siendo ciudadanos europeos, "tienen que trabajar en la economía sumergida". El consejero aseguró que al plantear este asunto en el Consejo Superior, Rumí ha respondido que las únicas posibilidades que caben es renovar la moratoria o no renovarla, además de manifestar que ese "no era el lugar adecuado" para analizar este tema. "Esto es arrogancia y una falta de diálogo lamentable", apostilló Lasquetty.
Otro de los puntos que las comunidades del PP intentaron analizar en el Consejo fue la necesidad de tratar en el Consejo el proyecto de Real Decreto que el Gobierno prepara para trasladar a regiones como Cataluña la competencia para conceder permisos de trabajo. "La respuesta de Rumí ha sido que esto no afecta a la Política de Inmigración, sino solo a la de trabajo", subrayó el consejero.
Finalmente, Lasquetty recalcó que las comunidades del PP solicitaron esta mañana el Gobierno que el Fondo Nacional de Acogida del Ministerio contara con más recursos, dado que llevan dos años congelados, además de reclamar criterios "más adecuados a la realidad" y que no se "perjudique a unas comunidades sí y a otras no".
"FALTA DE HONESTIDAD"
Los planteamientos presentados por Lasquetty fueron respaldados por la secretaria de Inmigración y Ciudadanía del Gobierno valenciano, Gotzone Mora, quien destacó la "falta de honestidad de un Gobierno que quiere girar la política de Inmigración con guante de seda". "Nos están esperando con las uñas para no decirnos nada a lo que traíamos. Vivimos en la nebulosa, sin propuestas reales, lo que supone hipotecar el futuro", zanjó.
Por ello, insistió en la necesidad de realizar grandes pactos de estado porque, a su entender, el Gobierno "no debe ser partidista y posicionarse ante las peticiones de las comunidades del PP antes de que éstas empiecen a hablar". "El Gobierno muestra una falta de respeto, de sensibilidad y un desaprovechamiento de las iniciativa que presentan las comunidades autónomas que soportan un porcentaje importantísimo de inmigración", recalcó.
Por su parte, el responsable de Inmigración en Castilla y León, Félix Colsa, denunció el trato que han recibido las comunidades del PP en la reunión de esta mañana. Desde su punto de vista, "no es lógico" que Rumí siga siendo secretaria de Estado de Inmigración y afirmó que las regiones populares se siente "ofendidas por el tono y por las formas, además de por el fondo", motivo por el que anunció que solicitarán que las convocatorias del Consejo se graben en vídeo para que se pueda ver el trato que reciben.
"Al final de la reuniones se nos riñe por pedir información y porque exigimos que se nos trate igual. El Gobierno central pide colaboración y todas las comunidades han sido altamente responsables y solidarias en materia migratoria desde hace año, pero el Gobierno no ha colaborado", afirmó, al tiempo que se quejó de que las autonomías no tienen la capacidad de negociar, teniendo que dar el sí a un contrato de adhesión.
Finalmente, el director general de Inmigración y Voluntariados de Murcia, Leopoldo Navarro, dijo haberse sentido "despreciado" en la reunión del Consejo e hizo hincapié en que Murcia, Madrid, Valencia y Castilla y León congregan a más del 50 por ciento del total de inmigrantes que hay en España.
Tras advertir de que Rumí les ha respondido a sus propuestas "con una prepotencia insultante", afirmó que las comunidades populares han salido del Consejo "un poco escocidas" y destacó que estas autonomías son "ingenuas" porque "todavía creen en la lealtad institucional con el Gobierno de Zapatero". "Hay algunos miembros del Ejecutivo, como Rumí, que se empreñan en demostrarnos lo contrario", dijo.
No obstante, aseveró que todas las comunidades del PP seguirán trabajando por sus ciudadanos, "tratando de que las políticas de integración de los inmigrantes se conviertan en un ejemplo a nivel nacional e internacional", concluyó.
