MADRID, 26 Dic. (EUROPA PRESS) -
Agentes de Policía Nacional y Municipal intervinieron 6.821 artículos falsificados de primeras marcas de cosméticos en dos almacenes de Madrid y Móstoles, cuyo valor en el mercado podría rondar los 280.000 euros, informa la Jefatura Superior de Policía de Madrid.
La operación conjunta se saldó con la detención de Mohamed E. B., de 23 años, al que se le atribuye la comisión de un delito contra la propiedad industrial y otro contra la salud pública. La investigación arrancó hace unas semanas a partir de unas informaciones que apuntaban a la existencia de dos naves ubicadas en Madrid capital y en la localidad de Móstoles donde podrían almacenarse multitud de efectos falsificados, principalmente cosméticos, perfumes, complementos de señora y tabaco.
Tras varios meses de investigación, en los que los agentes realizaron numerosas vigilancias y seguimientos a individuos marroquíes con antecedentes policiales por hechos similares, los policías lograron detener a Mohamed E. B.
Con el preceptivo mandamiento judicial, los policías entraron en los almacenes hallando en su interior un total de 6.821 artículos fraudulentos, entre los que destacaban 5.500 cosméticos de reconocidas marcas como Chanel, Lancome y Dior, así como 1.040 cajetillas de tabaco falsificadas.
Los investigadores pudieron constatar que en la nave de Móstoles, situada fuera del cinturón de la capital, almacenaba el grueso de los efectos. El acceso a este lugar gozaba de bastante seguridad toda vez que se controlaba con un código numérico que solamente conocía el jefe de la organización y desde donde se nutría al almacén de Madrid.
El único detenido hasta el momento ya contaba con antecedentes policiales por delitos contra la propiedad industrial, un robo con violencia e intimidación y por infracción a la Ley de Extranjería. Ya ha sido puesto a disposición de la autoridad judicial.
La operación fue dirigida por los policías del Grupo XXIII de la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (UDYCO) de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Madrid, y contó con la colaboración de los agentes de la Policía Municipal.
