MADRID, 20 Dic. (EUROPA PRESS) -
El portavoz de la Asociación de empresarios de Ocio Nocturno de la Comunidad de Madrid 'Noche Madrid', Vicente Pizcueta, ha mostrado el "rechazo" del colectivo del ocio nocturno a la enmienda de PP y PSOE a la Ley de Acompañamiento que permite a los establecimientos que pueden abrir más de 18 horas diarias vender alcohol más allá de las 22 horas, y ha alertado de la "facilidad extraordinaria" para hacer botellón que generará entrada en vigor de la Ley que aprueba el miércoles el Parlamento autonómico.
Después de que en la comisión ordinaria de Economía y Hacienda aprobara este lunes una enmienda conjunta de PP y PSOE que rompe con la prohibición total de vender alcohol en 'horario nocturno' (de 22 a 8 horas) que contenía la 'Ley Antibotellón' de 2002, Pizcueta ha mostrado, en declaraciones a Europa Press, su "sorpresa y rechazo" por esta medida, que, a su juicio, esconde algún interés oculto detrás.
Asimismo, ha considerado que la norma introduce mensajes "contradictorios" porque al mismo tiempo que permite más libertad a la hora de comprar alcohol, establece menos burocracia para que los padres de los menores que hacen botellón tengan obligación de hacer frente a las sanciones que imponen a sus hijos.
A su juicio, esta medida supone "facilitar extraordinariamente el botellón y potenciar la impunidad del botellón" al tiempo que "facilita al máximo el acceso al alcohol 24 horas al día", ya que que se elimina la necesidad de hacer "acopio en un supermercado" horas antes, lo cual tiene efectos disuasorios". "Ahora cualquier hora va a ser buena para hacer botellón", ha exclamado.
Pizcueta ha indicado que al margen de las consecuencias económicas para el sector, el botellón tiene un "efecto negativo en la imagen de Madrid". Además, como efecto derivado del botellón surgen los ruidos, algo que al final, repercute en el "recorte de horarios" de los establecimientos de hostelería, según defiende.
El portavoz ha señalado que los lateros, aquellos que venden cervezas en las colas de las discotecas y bares de copas, suponen un mayor perjuicio económico que el botellón para sus establecimientos. En su opinión, es "un problema de orden público que se va a agravar con la 'Ley del tabaco'".
"¿Qué objetivo tienen los grupos políticos que han apoyado esto en la Asamblea?", se ha preguntado Pizcueta al tiempo que ha dicho que ésta es una de las cosas que muestran las "distancias entre la sociedad civil y la clase política".
