Fuencarral honrará la memoria de siete víctimas de ETA poniendo su nombre a calles del distrito

Actualizado: viernes, 7 agosto 2009 12:24

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MADRID, 7 Ago. (EUROPA PRESS) -

Fuencarral-El Pardo honrará la memoria de siete víctimas de la banda terrorista ETA, como Miguel Ángel Blanco, Fernando Múgica o Fernando Buesa, poniendo su nombre a varias calles de nueva construcción, como aprobó por unanimidad la Junta Municipal presidida por Elena González Moñux.

Fernando Buesa dará nombre al vial con inicio en la calle Manuel Garrido y final en Cantalejo. El político socialista fue asesinado en febrero del año 2000 cuando caminaba por el campus de Vitoria de la Universidad del País Vasco. ETA hizo estallar un coche-bomba a su paso, matando a Buesa y a su escolta, el ertzaina Jorge Díez Elorza

Miguel Ángel Blanco tampoco podía faltar en este homenaje, con un vial que arrancará en Joaquín Lorenzo y acabará en Isla de Saipán, ya que los madrileños no podrían olvidar al joven concejal del PP en Ermua y la cuenta atrás que los terroristas hicieron de su vida en julio de 1997.

La fiscal Carmen Tagle, cuya calle arrancará en Cantalejo y terminará en Ángel Beato, fue asesinada a tiros por ETA en septiembre de 1989 a las puertas de su domicilio madrileño. La misma suerte corrió Fernando Múgica, abogado y conocido socialista, que recibió un tiro en la nuca en plena calle en 1996 delante de su hijo. Su calle estará entre la glorieta Isaac Rabín y la calle Joaquín Lorenzo.

Manuel Jiménez Abad dará nombre a la calle peatonal que termina en la calle Joaquín Lorenzo. De este modo, el Ayuntamiento recordará al que fuera presidente del PP de Aragón tras recibir dos disparos en la nuca y uno en el abdomen cuando se dirigía junto a uno de sus hijos al estadio de la Romareda para presenciar un partido entre el Zaragoza y el Numancia.

Los últimos homenajes serán para el concejal del PP en Sevilla Alberto Jiménez-Becerril y su esposa, Ascensión García Ortiz, ambos asesinados en enero de 1998 en una calle estrecha del casco histórico de la ciudad hispalense. Dejaron tres niños huérfanos de cuatro, cinco y nueve años. La calle en honor al edil se prolongará hasta Ángel Beato y la de su mujer terminará allí partiendo de la glorieta Francisco Bayeu.