MADRID, 17 Sep. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, ha hecho un llamamiento a la "revolución de la normalidad", apostando por impulsar proyectos lógicos en plazos sensatos, frente a la "política del marketing y del desgobierno" del presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez.
Durante su intervención en un desayuno informativo celebrado este lunes, Garrido ha remarcado que esta revolución comienza por "renunciar a la tentación de tener una ocurrencia distinta cada día, de buscar un titular fácil, de hacerse una foto, aunque sea una foto absurda".
Y es que, el dirigente madrileño cree que "la política del titular y la ansiedad de querer inventar la rueda todos los días, solo revela la impotencia para gobernar de quien cae en ella". En este punto, ha contrapuesto sus cien días liderando el Gobierno autonómico frente a los de Sánchez, el que ya se ha dejado dos ministros y una directora general "por el camino". "Todo un récord", ha deslizado.
PROYECTOS RAZONABLES
Así, ha recordado que una de sus primeras decisiones fue prorrogar la Estrategia de Madrid por el Empleo, "que supone una inyección de 800 millones de euros durante dos años", mientras que el presidente socialista admitió un "sindicato de trabajadores sexuales".
También, ha incidido en que otra de sus prioridades ha sido la bajada de impuestos mientras que el Gobierno central "amenaza con perpetrar la mayor subida de los últimos años y está escuchando a sus socios de Podemos que "les va a obligar a subir el IRPF".
Asimismo, ha contrapuesto la creación, por su parte, de una Consejería de Justicia mientras que el Ejecutivo de Sánchez se ha resistido a "defender al juez Llanera" así como ha puesto de ejemplo el "consenso" entre grupos para la elección de cargos de Radio Televisión Madrid frente a la "purga" que se está llevando a cabo en Radio Televisión Española, "en un ejercicio de estalinismo impropio del siglo XXI".
Otra muestra es, para el dirigente, que mientras la Comunidad "dialoga y cierra acuerdos", el Gobierno central "solo se entiende con quienes piensan como ellos, o están más a la izquierda" y se ha mostrado experto en "romper consensos, empezando por el consenso del bloque constitucional en el tema de Cataluña".
En definitiva, para Garrido, "los proyectos razonables del Gobierno de la Comunidad y el modelo político a largo plazo del PP confirman que éste no va a ser un curso para descansar o de mero trámite antes de las elecciones de mayo de 2019" sino que será estará "repleto de ideas, de gestión, de ilusión y de empuje, y con la vista puesta en el mañana".
