El IES Emilio Castelar entiende la reorganización del Bachillerato nocturno pero denuncia la falta de información

Actualizado: jueves, 19 marzo 2009 12:05

La Comunidad reorganiza la modalidad en los institutos y la eliminará de seis centros dada la bajada de demanda

MADRID, 19 Mar. (EUROPA PRESS) -

El IES Emilio Castelar será uno de los centros que el curso que viene cierre su Bachillerato nocturno, y aunque sus profesores entienden la necesidad de reorganización de este ciclo en función de la demanda, denuncian la falta de información por parte de la Consejería de Educación, que, a su juicio, ha seguido criterios "poco serios" a la hora de cerrar unos centros y dejar otros abiertos, sin tener en cuenta factores como su acceso al transporte público.

En declaraciones a Europa Press, uno de los portavoces del IES Emilio Castelar, en el distrito de Carabanchel, explicó que en ningún momento han sido informados "de nada" y que se enteraron del cierre de algunos centros a través de las noticias publicadas en algunos medios de comunicación gratuitos que recogían la queja del sindicato CSIT denunciando la situación actual de los Bachilleratos nocturnos, tan necesarios, en su opinión, en épocas de crisis.

Aunque este portavoz aseguró que los profesionales de Educación son "conscientes" de que la demanda ha bajado y de que, quizá, haya demasiados centros con Bachillerato nocturno que podrían ser reagrupados, "y más en tiempo de crisis para racionalizar", pide que dicha reestructuración "se haga conforme a criterios razonables", como la estructura de distritos de la ciudad, o la propia red del transporte.

Es el caso del IES Emilio Castelar, situado en plena plaza de Oporto, donde, además de dos líneas de Metro (la 5 y la circular), cuentan con un intercambiador de autobuses en el exterior, con conexiones a municipios de los alrededores de la capital, como Leganés, y con las propias líneas de Empresa Municipal de Transportes (EMT). "Somos el mejor instituto comunicado de todos", insistió.

En este sentido, señaló que es positivo reducir el número de institutos pero que dicha reorganización se haga de tal forma que "permita al alumnado acudir al centro con rapidez, con un buen acceso al transporte público". "Precisamente por esto nunca nos hubiéramos imaginado que uno de los centros que se cierra es el nuestro, por su ubicación", apostilló el profesor, quien acusó a la clase política de "no hacer las cosas con seriedad".

En cuanto a la situación de los docentes, desde el IES aseguran que ese no es el problema pues el claustro de profesores que trabaja en el Bachillerato nocturno son todos funcionarios y serán recolocados en el turno diurno, que sí permanecerá abierto. El problema, viene por tanto, con la situación de los alumnos, que tendrán que matricularse, por lógica, en los dos IES más cercanos a la zona, o bien el Pío Baroja, en Usera; o el Mariano José de Larra, en Latina.

LIGERO AUMENTO DE LA DEMANDA

Aunque progresivamente la demanda ha ido bajando, este curso y el anterior se apreció un ligero repunte con la presencia de un elevado número de alumnado inmigrante, procedente, sobre todo, de Ecuador o Polonia. De hecho, este curso, donde hay autorizados tres grupos, el IES cuenta 41 alumnos en el primer bloque; 31 en el segundo bloque, y 54 en el tercer Bloque, lo que suman un total de 126.

Una de las razones que la Comunidad de Madrid esgrime para reducir el número de centros es que cada clase tenga al menos unos 60 alumnos, teniendo en cuenta que luego la abstención es alta y el número se reduce casi a la mitad. Sin embargo, los profesores no entienden que se tenga en cuenta este requisito en el curso anterior cuando las matrículas no se conocen hasta el mes de septiembre, cuando esta modalidad ya esté suprimida.

Según informaron desde la Consejería de Educación a Europa Press, actualmente hay 34 Institutos que imparten Bachillerato nocturno en toda la Comunidad. No obstante, el próximo curso la cifra se reducirá a 28, es decir 6 menos. La razón, en todos los casos, es la "escasa demanda", ya que las matriculaciones vienen bajando progresivamente curso tras curso.

Ante esta falta de demanda, la Administración Educativa ha decidido, tal y como ha señalado la consejera Lucía Figar en otras ocasiones, redistribuir los alumnos en los otros centros cercanos con el fin de optimizar los recursos educativos. Ante esta situación, los alumnos que estén cursando 1º y 2º de Bachillerato en alguno de los centros que no ofertarán más esta modalidad de Bachillerato serán escolarizados con preferencia en el centro de su elección.

Además del Emilio Castelar, que según datos de Educación, el próximo curso contará con 65 alumnos que quieran continuar con sus estudios, se verá afectado por el cierre de la modalidad el IES Jaime Vera, en Tetuán. La supresión del Bachillerato en régimen nocturno se ha llevado a cabo de manera progresiva desde el curso 2006-2007, y en el curso actual sólo se imparte el tercer bloque de bachillerato a menos de 10 alumnos. Cuando estos terminen el curso dejará de impartirse.

En el caso de IES Pacífico, en Retiro, también se ha venido suprimiendo la modalidad progresivamente. Actualmente sólo tiene escolarizados a 10 alumnos en 2º y 15 en 3º, y si los 10 alumnos de 2º deciden continuar sus estudios podrán hacerlo con carácter preferente en el centro de su elección, recuerdan desde el Departamento de Educación.

El IES San Cristóbal de los Ángeles, en Villaverde, es otro de los más afectados, que ya en el presente curso escolar tiene matriculados 41 alumnos en todo el bachillerato nocturno (20 en 1º, 9 en 2º y 12 en 3º). Además de estos centros, se suprimirá el bachillerato nocturno el IES Gerardo Diego (Pozuelo de Alarcón) y el IES Felipe Trigo (Móstoles).

El bachillerato nocturno es un tramo educativo no obligatorio demandado por personas adultas (mayores de 18 años y muy excepcionalmente con 16 años). El perfil medio del alumnado corresponde a una persona con trabajo o que está en espera de obtenerlo.

Para que un instituto pueda mantener el régimen de bachillerato nocturno requiere una matrícula inicial de, al menos, 60 alumnos por curso, de manera que se mantenga una asistencia del 42 por ciento (25 alumnos de media) a lo largo del curso.