MADRID, 21 Oct. (EUROPA PRESS) -
Los jueces de Madrid se reunirán hoy en Junta para emitir una valoración conjunta en contra de las injerencias del Ejecutivo central en las decisiones judiciales y a favor del aumento de medios a implantar en la Administración de Justicia para paliar las actuales deficiencias estructurales que aquejan a los tribunales españoles, espacialmente a los madrileños.
En la reunión, el juez decano de Madrid, José Luis Armengol, someterá a aprobación los escritos de protesta emitidos en este sentido por los jueces decanos reunidos hace quince días en Cádiz, el aprobado la pasada semana por los presidentes de las audiencias provinciales y el suscrito ayer por los magistrados del Tribunal Supremo.
También se pronunciarán sobre el número de juzgados que, a su juicio, necesita cada partido judicial y reclamarán una revisión de los módulos (carga de trabajo) exigidos a cada órgano judicial. Armengol adelantó que estudian no registrar ni pasar a reparto las causas que excedan de los citados módulos.
El atasco que encara el Decanato de los juzgados de Plaza de Castilla por el volumen de trabajo está obstaculizando actualmente importantes investigaciones judiciales por los retrasos en la entrada de escritos presentados. Entre las afectadas por esta saturación figura la causa que investiga el accidente del avión de Spanair y la relativa al 'caso Guateque'.
REUNIÓN EN EL CGPJ
El máximo representante de los jueces madrileños asistió esta mañana a la reunión convocada en la sede del Consejo General del Poder judicial (CGPJ) por su nuevo presidente, Carlos Dívar, para analizar la actual situación de la Justicia.
Dívar se comprometió con las asociaciones judiciales y con una delegación de 14 jueces decanos de toda España a "liderar" sus reclamaciones frente al Ejecutivo central y aquellas autonomías con competencias en este ámbito, así como a defender la independencia del Poder Judicial ante cualquier injerencia desde ámbitos políticos.
En el marco del encuentro, Armengol criticó que el Consejo no hubiera salido a protestar "en bloque" por las injerencias del Gobierno en el expediente al juez Rafael Tirado y que, una vez lo ha hecho, la respuesta haya sido "liviana y sin contundencia".
Ante las amenazas de paros, recordó que los jueces de Francia, Portugal e Italia fueron en su día a la huelga para exigir un incremento de sus retribuciones y no descarta que, de proseguir la actual situación, los jueces españoles acaben convocando paros, una posibilidad que, a su parecer, no les es negada por la Constitución ni por la Ley Orgánica del Poder Judicial.
Las protestas tienen su origen en las manifestaciones realizadas recientemente tanto por el ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, como por la vicepresidenta primera y portavoz del Gobierno, Maria Teresa Fernández de la Vega. Ambos han reclamado públicamente una sanción más dura para el juez Tirado.
El juez Tirado, al frente del Juzgado de lo Penal número 1 de Sevilla, tramitó los procesos penales abiertos contra Santiago del Valle, el presunto asesino de la niña Mari Luz. El Poder judicial le multó recientemente con 1.500 euros por los retrasos en la ejecución de una sentencia por abusos sexuales dictada contra Del Valle, sobre el que pesaban dos penas firmes que no llegaron a hacerse efectivas.
La decisión final sobre el magistrado está pendiente de la resolución que adopte el nuevo Consejo tras el recurso interpuesto por la Fiscalía, que pide que el juez sea suspendido por tres años.
