El magistrado Carlos Granados es nombrado director de la Oficina municipal Anticorrupción

Carlos Granados, presidente de la Junta Electoral Central
CONGRESO
Publicado: miércoles, 31 enero 2018 10:22

MADRID, 31 Ene. (EUROPA PRESS) -

El magistrado Carlos Granados ha sido nombrado director de la Oficina del Ayuntamiento de Madrid contra el Fraude y la Corrupción por mayoría absoluta del Pleno, con los votos favorables de Ahora Madrid --incluido el del delegado de Desarrollo Urbano Sostenible, José Manuel Calvo, presente únicamente en esta votación para continuar con su baja por paternidad-- y el PSOE, y la oposición de PP y Cs.

El nombramiento ha salido adelante en segunda vuelta al no haberse conseguido en la primera el respaldo de 35 votos, tres quintos del plenario.

La portavoz del Gobierno municipal, Rita Maestre, ha dado la bienvenida a Carlos Granados, magistrado, presidente de la Junta Electoral, Fiscal General del Estado, con una carrera judicial iniciada en 1970, que ha aceptado ponerse al frente de la oficina, en la que algunas funciones (las de inspección) están suspendidas por una medida cautelar al entender la Justicia que pueden ser competencias "altamente coincidentes con la Intervención General o con la Inspección". Siguen adelante todas las demás funciones de prevención.

Maestre ha pedido a la Corporación "que piensen con generosidad y visión de futuro" a la hora de respaldar a Granados como director de la Oficina porque "hasta ahora las herramientas de la institución no han sido suficientes para controlar la corrupción". La edil ha defendido "todo esfuerzo extra para prevenir conductas fraudulentas y corruptas".

La portavoz socialista en el Ayuntamiento de Madrid, Purificación Causapié, ha puesto en valor "la honestidad y el gran valor profesional" de Carlos Granados, que hace un "honor" a la ciudad aceptando el cargo. La edil ha destacado además que es la primera vez que el Ayuntamiento somete a votación la idoneidad de un candidato, quien "no puede recibir órdenes del gobierno", razón por la que la Oficina está adscrita al Pleno.

"Esperamos grandes resultados para combatir la lacra de la corrupción, que cuestiona la democracia y el sistema de derechos. Tenemos que poner recursos para erradicarlas", ha añadido, después de lamentar que esta Oficina no hubiera estado en marcha antes para evitar casos en el seno del Ayuntamiento como Imefe, Guateque, Púnica y Gürtel.

REY MIDAS AL REVÉS

Las críticas han venido de PP y Cs. El portavoz de Transparencia del PP, Percival Manglano, ha comenzado su intervención renombrando a la alcaldesa, Manuela Carmena, como 'Sadim Yer', "Rey Midas pero al revés porque todo lo que toca lo convierte en chatarra y lo estropea" dado que la Oficina planteada a todos los grupos por una asociación privada era una "buena idea" pero fue modificada hasta llegar al reglamento actual, que ha criticado al considerar que entra de lleno en las funciones de otros departamentos.

"Han aprobado un taburete de tres patas y la Justicia les ha quitado dos", ha lanzado Manglano, que ha opinado que Carlos Granados tiene que tener en cuenta que un grupo municipal como Ahora Madrid tiene a la "mitad" de los concejales por la labor de "cargarse los valores constitucionales".

La concejala de Cs Silvia Saavedra ha alabado la profesionalidad de Carlos Granados aunque ha asegurado que siente "lástima" por él al ponerle "al pie de los caballos" por el Ejecutivo. Ha arremetido contra el reglamento de la Oficina, que se aprobó tras rechazar una proposición previa de su partido en este sentido por "interés partidista". La Oficina de Ciudadanos "apoyaba cualquier medida anticorrupción pero con el límite en el respeto al ordenamiento legal".

Tras escuchar las críticas a Granados, Rita Maestre ha exigido a PP y Cs que dejasen a un lado su "condescendencia" y mostraran "un mínimo de respeto" porque el magistrado es "plenamente consciente" del cargo que acepta. No ha terminado su intervención sin señalar al PP que "los casos de corrupción vienen de su partido" y que si tanto ellos como Cs no apoyan el nombramiento es por "motivos partidistas".