MADRID, 16 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Madrid estima que el importe de las obras de reforma de la piscina cubierta del recinto deportivo Fernando Martín, en el distrito de Moncloa-Aravaca, alcanza los 1,2 millones de euros y que se procederá a ejecutar esas labores cuando la disponibilidad presupuestaria lo permita.
"Me gustaría poder decirle que hay dinero en este ejercicio o en el próximo y cuando exista esa posibilidad presupuestaria se asumirán las obras que sean necesarias para poner en marcha esta instalación. Lo que no vamos a hacer es que cuando existe deficiencias importantes que aconsejaron su cierre, vamos a mantener esa postura", indicó el vicealcalde de Madrid, Miguel Ángel Villanueva, durante la última Comisión Municipal de Urbanismo
El vicealcalde detalló que la Dirección de Control de la Edificación detectó deficiencias estructurales en esta piscina y que, en consecuencia, adoptó como medida de seguridad el cierre para el usuario de esta instalación y evaluar las necesarias obras de reforma que debían acometerse. Concretamente, apuntó a que el coste de las labores se centran en el refuerzo de la cimentación de la piscina.
No obstante, Villanueva remarcó que los ciudadanos del distrito disponen de nueve centros deportivos municipales y tres de ellos cuentan con tres piscinas cubiertas como opciones alternativas. Además, ha agregado de en otros distritos colindantes que cuentan con centros que tienen piscinas climatizadas como el caso del Triángulo de Oro y el Antonio Díaz Miguel (Tetuán) y los de La Vaguada, Vicente del Bosque y el centro Damasó (Fuencarral-El Pardo).
Por su parte, el edil del PSOE Alberto Mateo afirmó que este recinto presenta desperfectos desde hace 20 años y que la piscina ya estuvo cerrada durante un periodo comprendido entre 2010 y abril de 2011 donde se aprovechó para hacer una reestructuración como fue la incorporación de rampas para discapacitados y arreglar los vestuarios.
Al respecto, Mateo se preguntó en su intervención por qué no se procedió entonces, dado que esas obras de reestructuración contaron con financiación estatal, a efectuar las mejoras de las deficiencias ahora detectadas en lugar de volver a cerrar la piscina en julio de 2012 "sine die".
"Las perspectivas que nos dan no son nada halagüeñas", reiteró el concejal para remarcar que los vecinos, a su juicio, no tienen cerca otras instalaciones similares y no pueden practicar deporte o actividades relacionadas con el mantenimiento de la salud.
