MADRID, 11 Sep. (EUROPA PRESS) -
Las organizaciones ecologistas Amigos de la Tierra, Ecologistas en Acción, Greenpeace, Seo/Birdlife y WWF/Adena, alertaron hoy de los problemas medioambientales que puede causar que los agentes forestales no puedan entrar en las fincas privadas, y mostraron su indignación por la situación de desprotección en que se encuentran las principales especies amenazadas de la Comunidad de Madrid.
Las organizaciones advirtieron del impacto que tendría en una zona donde "habita una parte muy importante de las mismas, tal como ha puesto de manifiesto el informe de la Fiscalía de Medio Ambiente de Madrid y las repetidas denuncias de las organizaciones ecologistas". "Este recorte en las atribuciones de los agentes forestales contrasta con la enorme importancia de la Comunidad para especies tan amenazadas de extinción como el Águila Imperial Ibérica o el Buitre negro, especies de las que aparecieron ejemplares envenenados en Chapinería recientemente", criticaron las organizaciones.
Las organizaciones ecologistas consideran a Madrid como "un auténtico punto negro" para muchas especies de aves en grave peligro. El uso de veneno es uno de los principales riesgos, aseguraron las organizaciones, "como demuestra el hecho de que en algo más de una década se encontraron envenenados en Madrid un gran número de buitres negros y al menos 18 ejemplares de águila imperial, una de las rapaces más amenazadas del planeta".
Los ecologistas calculan que el número de rapaces envenenadas podría multiplicarse por tres dado la dificultad para encontrar los cadáveres "en un territorio tan amplio y cada vez más plagado de vallas cinegéticas que separan las fincas privadas", función que realizaban los agentes forestales.
Las organizaciones también criticaron que a pesar del reiterado uso del veneno en la Comunidad de Madrid "la sensación de impunidad ante este delito es total ya que la administración regional no ha cerrado un solo coto en los últimos años por esta causa".
El informe del fiscal de medio ambiente señaló a las que van a ser las principales víctimas del recorte de competencias de los agentes forestales, según los ecologistas, ya que "sin su labor dentro de las fincas es imposible detectar de forma rápida los animales envenenados y por tanto se hace imposible denunciar con eficacia la colocación del veneno", por lo que volvieron a exigir al Gobierno de Esperanza Aguirre que proteja a las especies amenazadas de las que es responsable y garantice su vigilancia devolviendo a los agentes forestales sus atribuciones.
"La naturaleza en Madrid sufre una situación de agresión sin precedentes. Exigimos una rectificación urgente a la Comunidad de Madrid, y que se facilite el trabajo de agentes forestales, fiscalía de medio ambiente y Seprona para luchas contra el veneno" declaró el director ejecutivo de Greenpece, Juan López de Uralde. "La situación actual es insostenible y está poniendo en grave riesgo la pervivencia de las especies más amenazadas de Madrid", concluyó.
