El Plan Parcial de Chamartín podría llegar al Pleno pasado el verano para que los trabajos arranquen en 2011

Actualizado: domingo, 16 mayo 2010 13:45

MADRID, 16 May. (EUROPA PRESS) -

El Plan Parcial de la operación Chamartín llegará al Pleno probablemente nada más terminar el verano, en septiembre, con la idea de que los trabajos arranquen en 2011 para culminar en unos doce años.

Así lo explicaron fuentes municipales a Europa Press, que concretaron que en este momento se están estudiando las alegaciones presentadas para admitirlas o no, con la idea de adaptar el documento a aquello que se acepte.

La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Madrid aprobó el pasado noviembre de manera inicial el Plan Parcial de Prolongación de la Castellana, que incluirá el cierre de la M-30 mediante la construcción del by-pass norte (1.400 millones de euros para la conexión de la avenida de la Ilustración con Pio XII y la A-1), la construcción de 17.000 viviendas, de las que 4.000 serán de protección pública, así como la generación de 20.000 puestos de trabajo medios mantenidos durante los doce años que durarán las obras.

La prolongación de la Castellana va desde el Nudo Norte hasta la M-40, casi en el límite del término municipal de Madrid y a lo largo de un ámbito de 312 hectáreas. El objetivo es crear la gran ciudad financiera de la capital, para lo que se prevé una inversión de 11.000 millones derivada del proyecto, de los 4.300 corresponden a la urbanización de infraestructuras y 6.800 a la edificación.

Su principal consecuencia será la creación de 20.000 puestos de trabajo, entre directos e indirectos, mantenidos durante los doce años que durarán las obras. Y es que en la primera etapa, entre 2011 y 2014, cuando se construirán las infraestructuras, el número de empleos estimados será de 25.000 al año.

La nueva Castellana tendrá una población, entre permanente y temporal, de 240.000 personas, esto es, superior a la de municipios como Alcobendas o Torrejón de Ardoz. La idea es que unas 52.000 personas residan en el ámbito y otras 88.000 trabajarán en él. Para hacer eso posible se reequilibrarán los usos dedicándose el 47 por ciento a terciarios --primarán las oficinas, con 1,2 millones de euros, y se unirán a los 165.000 metros cuadrados de uso hostelero y otros tantos de comercial-- y el otro 50 restante a residenciales.

En cuanto al uso residencial, se construirán 17.000 viviendas, de las cuales 4.000 serán de protección pública correspondiendo la promoción de 1.315 al Ayuntamiento de Madrid; 739, a la Comunidad, y 1.946 al Ministerio de Fomento a través de ADIF-RENFE. De los más de tres millones de metros cuadrados que se van a transformar con este plan parcial, un 17 por ciento son parcelas de uso privado; otro tanto zona verde; un 10 por ciento a equipamientos públicos y el resto infraestructuras viarias o ferroviarias.

Las infraestructuras son otra de las grandes apuestas del ámbito. Se construirá con cargo a los propietarios del suelo y con un coste de más de 1.900 millones de euros la prolongación de la línea 10 de Metro en 4,2 kilómetros con cinco nuevas estaciones; la ampliación en 2,6 kilómetros de la Castellana y su conexión con las circunvalaciones M-30 y M-40; los cuatro nuevos ejes transversales; y el cubrimiento de 600.000 metros cuadrados de superficie ocupados por vías de ferrocarril para eliminar la barrera creada históricamente por el ferrocarril a lo largo de más de cinco kilómetros.

Por su parte, el Ministerio de Fomento y ADIF acometerán la remodelación y ampliación de la Estación de Chamartín y la construcción de dos nuevas estaciones de Cercanías, que se suman al túnel para el AVE entre Chamartín y Atocha, y la conexión con el aeropuerto de Barajas, ya en ejecución.