MADRID, 12 Jul. (EUROPA PRESS) -
El responsable de Medio Ambiente en el grupo municipal socialista, Pedro Santín, solicitó hoy la puesta en marcha de un plan de choque de limpieza integral en el distrito Centro, puesto que "hay que acabar con la suciedad, insalubridad y abandono de muchas de las calles de esta zona, sobre todo las de Lavapiés y las inmediaciones de la calle Toledo".
Centro es el distrito en el que el Ayuntamiento gasta más dinero en limpieza. La suma total es de 25 millones de euros al año, diez veces más de lo que cuesta este servicio en Barajas, ocho veces más de lo que se emplea en Vicálvaro o Vallecas y cinco veces más que en Moratalaz y Usera.
"El Gobierno Municipal gestiona mal", criticó Santín, quien achacó a esa "pésima administración de los fondos para limpieza" que el distrito más emblemático de Madrid ofrezca "un lamentable espectáculo de cacas de perro, pintadas, orines, contenedores y papeleras rebosantes, botellas y todo tipo de basuras ".
En la zona del Rastro la suciedad se incrementa todos los domingos con la afluencia de miles de personas. "El dispositivo de limpieza que el Ayuntamiento de Madrid destina al Rastro es claramente insuficiente", aseveró el concejal, quien precisó que "son necesarios más medios humanos y técnicos para la recogida de los residuos, evitar su amontonamiento y, por supuesto, baldear las calles con la intensidad y frecuencia que se requiera para mantener estos espacios limpios".
Paradójicamente, Centro es el distrito que tiene menos contenedores para la recogida selectiva de papel y cartón. Mientras que en Latina o Puente de Vallecas hay más de 200, aquí sólo cuentan con 170, pese a generar alrededor de 30.000 toneladas de papel al año, el triple que en cualquier otro lugar de la ciudad.
En Centro hay más de 3.000 bares, restaurantes, discotecas y otros lugares de ocio, lo que lo convierten en el mayor consumidor de vidrio de Madrid: 3.200.000 kilos al año, ocho veces más que en Vallecas Villa, Vicálvaro o Barajas.
"Y sólo hay 222 recipientes para este residuo", denuncia Santín, uno para cada 670 residentes, uno para cada 14 bares o locales de este tipo. "Por eso es habitual ver botellas rotas alrededor del contenedor", explicó.
También es Centro el distrito que presenta mayor densidad de excrementos caninos en la ciudad, puesto que hay más de 12.000 perros censados que, en 2008, dejaron 600.000 kilos de deposiciones en las calles, de las que el Ayuntamiento sólo recogió la sexta parte.
"Los jardines y plazas, sobre todo la de Santa Ana, la de la Paja y la de la Cebada se han convertido en el "cuarto de baño" habitual de los canes de la zona", ironizó Santín, mientras denuncia que "no limpian este tipo de suciedad, las "motocacas" no aparecen y la labor de concienciación para prevenir no está siendo eficaz".
En quitar carteles y pintadas de este distrito el Ayuntamiento emplea dos millones de euros al año, sin que los resultados sean apreciables. Los malos olores que generan orines y otras sustancias en vías, pasos subterráneos y alrededor de algunas plazas no terminan de generar molestias porque nadie se ocupa de lavar las calles.
Y los residentes en Centro tienen que ir a depositar sus muebles y enseres viejos a varios kilómetros, porque los lugares adecuados para tal fin están en Retiro, Carabanchel, Fuencarral o Latina.
Santín denunció que ni Medio Ambiente ni la Policía Municipal hacen cumplir la Ordenanza de Medio Ambiente que impide arrojar basuras y desperdicios a la calle.
"La consecuencia de esta desidia es que hay una indisciplina total y absoluta en las plazas de Centro, donde bares y establecimientos comerciales depositan toda clase de residuos en la calle fuera de los contenedores, hasta cuatro o cinco horas antes de que pase el camión de recogida de basura", concluye el concejal.
