Cree que socialistas como Almunia o González "también se equivocan" y que los organismos internacionales "no pueden estar orgullosos"
MADRID, 4 Ago. (EUROPA PRESS) -
El secretario general del Partido Socialista de Madrid (PSM), Tomás Gómez, apostó hoy por alcanzar un "gran pacto de Estado para modificar la economía productiva y ser más competitivos" mediante el "equilibrio de los sectores productivos" para conseguir superar el modelo heredado del Franquismo que se basa en los servicios y la construcción.
En una entrevista con Europa Press, el socialista explicó que, durante la época de Gobierno de José María Aznar y Rodrigo Rato, "que tienen gran parte de responsabilidad en lo que está pasando, se decidió que el Banco de España autorizara la ampliación de los plazos de amortización de las hipotecas al tiempo que se reducían los tipos de interés".
"Esto hizo que, durante años, los ciudadanos ahorradores e inversores 'colocaran' su dinero en el sector inmobiliario, mientras que si no se hubiera ampliado el plazo de las hipotecas probablemente se hubiera derivado gran parte de los recursos económicos y financieros de nuestro país a otros sectores productivos alternativos más sólidos para la economía nacional", diagnosticó.
Por eso, lo esencial para superar la crisis es recuperar el "equilibrio de los sectores productivos" dejando de primar a los servicios y el cemento mediante un gran pacto de Estado en el que será precisa "la generosidad de todas las partes para hacer que la economía española sea más productiva, más competitiva, y con más equilibrio en la balanza comercial y en la de pagos".
La solución pasa, por tanto, por conceptos como investigación, nuevas tecnologías, energías alternativas o economía sostenible. "¿Y quién se ha planteado de manera seria eso? Es el PSOE el que está pensando en el futuro del país", resumió, destacando que "éste es el primer Gobierno desde la transición que en momentos de crisis no ha practicado recortes sociales".
DIÁLOGO SOCIAL
Entre los actores imprescindibles para sacar adelante una propuesta de estas características se cuentan los sindicatos y la patronal, con la que la semana pasada se rompieron las negociaciones como consecuencia de su exigencia de negociar el modelo laboral.
"Yo creo que quien ha fracasado realmente en el diálogo social ha sido la CEOE, la gran patronal. Desde luego, el diálogo social debe ir mucho más allá de la rebaja de las cotizaciones sociales o la ampliación por prestación por desempleo. Estamos hablando de cómo hay que cambiar la estructura financiera y productiva de nuestro país, de cómo podemos ser capaces de crecer económicamente y frenar el desempleo sin perder prestaciones y políticas sociales", coincidió Gómez con su partido.
Y es que "el diálogo social es la base fundamental para poder avanzar en ese sentido y, aunque desde luego cada uno tiene que defender a su colectivo y a sus intereses, hace falta la responsabilidad, generosidad y sentimiento de Estado de todos, y en este momento la patronal no ha defendido los intereses de los empresarios sino los del Partido Popular".
"Cuando en la Comunidad de Madrid nueve de cada diez contratos son precarios, cuando hay muchísimos mileuristas, a un cajero de una gran superficie, ¿le decimos que es necesario flexibilizar aún más? No es un problema del mercado laboral sino un problema financiero", sentenció.
CRISIS Y PARO
A ojos de Gómez, el fenómeno del paro en España es "un problema estructural arrastrado desde 1956", consecuencia de una estructura productiva que emplea a más gente que en otros países para realizar el mismo trabajo, situación que "hay que cambiar".
Sin embargo, algunos miembros destacados de su partido como el ex presidente Felipe González o el comisario de Economía de la UE, Joaquín Almunia, se cuentan entre las voces que piden a Zapatero que acometa las reformas laborales necesarias para superar la crisis.
"Que sean socialistas no quiere decir que no puedan estar equivocados. Ésta es una crisis económica y financiera y tiene su origen en una política financiera en Estados Unidos, que se traduce en una crisis económica mundial, global, internacional, sin precedentes", insistió el secretario general del PSM.
A su parecer, las soluciones para una crisis financiera son "medidas financieras: políticas fiscales de incremento de gasto público, de la demanda agregada, del consumo... para tirar hacia arriba de la economía".
"Esto no tiene nada que ver con el mercado laboral. De hecho, el mismo mercado laboral ha sido capaz de tener en España tasas de crecimiento del 4 por ciento y cifras que apuntaban que llevarían al pleno empleo", zanjó.
ESPAÑA La MEJOR PREPARADA
Pese a todas estas dificultades y al atraso histórico del país en la puesta al día de sus estructuras económicas, Gómez coincidió con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en que "España ha sido el país mejor preparado y sólido en lo que se refiere a su estado financiero".
"El presidente ha ido en cada momento diciendo cuál era la situación que se vivía y cuáles eran las expectativas que había. Es verdad que cuando hablaba de desaceleración económica nadie tenía remotamente idea de que íbamos a atravesar la crisis global de la historia, una crisis de esta envergadura, de esta profundidad y tan larga en el tiempo", explicó el líder madrileño.
Además, opinó que los organismos internacionales como el Fondo Monetario Internacional (FMI) o el Banco de España (BE) "no pueden sentirse orgullosos de su pasado más inmediato" por la "falta de previsiones y de regulación de los mercados", y exigió un "nuevo orden internacional en lo económico y social".
Pese a ello, destacó que en España "no ha habido que nacionalizar ningún banco y ha habido escasas intervenciones en el sistema financiero", por contra de los sucedido en países como Estados Unidos, Reino Unido, Alemania, Holanda, Bélgica u Holanda, donde se han sucedido las "intervenciones en el conjunto de la banca más potente de la economía mundial".
Así, defendió que "la banca española es la que mejor se ha mantenido, la que mejor lo ha gestionado, la que mejor ha resistido, la más sólida del conjunto del orden financiero mundial", y reconoció la labor del Banco de España que, tras las 'hipotecas basura', su "mayor control ha permitido un estado financiero consistente".
"Pero claro, el estado financiero de los bancos es como la sangre en el sistema circulatorio del cuerpo: el cuerpo no puede funcionar si no fluye la sangre, ésa es la función que tiene y lo que tiene que hacer el sistema crediticio y financiero en el conjunto de la economía. Por eso es importante que no se venga abajo", explicó gráficamente.
