MADRID, 26 Abr. (EUROPA PRESS) -
Vecinos de los municipios de Boadilla y Pozuelo de Alarcón aseguraron hoy que el ruido que provoca el Metro Ligero Oeste sigue superando los valores máximos permitidos "impidiendo el descanso de cientos de ciudadanos, tanto de día como de noche", casi un año después de que comenzaran sus quejas.
La Asociación de Afectados por el Metro Ligero Oeste detalló hoy en un comunicado que "instituciones independientes" al Gobierno regional, como la Policía Municipal y el SEPRONA, realizaron medidas acústicas en las que se comprobó que "no se respetan los valores máximos de niveles de ruido que regula el real decreto 178/1999 de la Comunidad de Madrid". Las mediciones detallan que se superan "entre 15 y 30 decibelios tanto en el exterior como en el interior de lasviviendas".
La entidad instó hoy a la presidenta regional, Esperanza Aguirre, y al consejero de Transportes, Manuel Lamela, a revisar el estudio deDeclaración de Impacto Ambiental que se hizo previamente a las obras del Metro Ligero, "al igual que ahora están exigiendo con el eje Prado-Recoletos".
Los vecinos agrupados en esta asociación aseguraron que las respuestas recibidas por parte de algunas instituciones con competencia en este asunto "alegan que los niveles de ruido emitidos están dentro de los permitidos pero nunca expresan estos resultados ni con valores en decibelios ni con localizaciones geográficas".
