WASHINGTON, 5 May. (EP/AP) -
El grupo DaimlerChrysler revisará 45.000 vehículos de los modelos Chrysler 300, Dodge Charger y Dodge Magnum por posibles fugas en los conductos del líquido de frenos que pueden provocar fuego al entrar en contacto con el combustible, informó hoy la compañía.
DaimlerChrysler informó de que esta retirada afectará a los modelos fabricados durante 2006 que tengan motores de 2,7 litros, ya que en algunos casos un gastado conducto de redistribución de la gasolina puede hacer entrar en contacto el combustible con los tubos del líquido de frenos, lo que puede provocar un importante escape y generar fuego.
Un portavoz de la compañía, Max Gates, explicó que el fabricante ha tenido conocimiento de seis casos de fuego en el motor por este problema, aunque no han recibido ninguna notificación de accidentes o lesiones debidas a este fallo mecánico.
La retirada de la circulación de todos estos vehículos servirá para revisar la parte trasera de los conductos de freno para su sustitución en caso de que fuera necesario. Sin embargo, los mecánicos instalarán una horquilla de seguridad en todos los modelos revisados.
JEEP WRANGLER DEFECTUOSOS.
Por otro lado, la compañía tiene previsto revisar cerca de 7.000 Jeep Wrangler, equipados con cambio manual de seis velocidades, por problemas con el embrague. Según informó DaimlerChrysler, la varilla del cilindro principal del embrague hidráulico puede estar rota, lo que dificultaría el desengranaje del embrague cuando el pedal esté sin pisar.
Gates explicó que este defecto se pone de manifiesto durante paradas largas y puede provocar que se cale el motor. Asimismo, admitió que han recibido 17 quejas sobre este problema, aunque ninguna sobre accidentes. La compañía reparará estas deficiencias en sus vehículos sin ningún coste para los usuarios.
