BARCELONA, 15 Abr. (EUROPA PRESS) -
La dirección de Nissan y los sindicatos mantendrán hoy el primer encuentro ante la Administración después de que el 31 de marzo acabara el periodo de vigencia del plan de bajas voluntarias, que recabó unas 245 adhesiones y dejó todavía un excedente de unos 1.000 trabajadores en la factoría de Barcelona.
La compañía reconoció entonces que el plan no había cubierto los objetivos --a pesar de destacar la salida de 650 personas de la fábrica en los últimos seis meses-- y anunció que estudiaría el escenario al que se enfrentaba para tener una plantilla adecuada a la carga productiva en septiembre como fecha límite, advirtiendo que tomaría "las decisiones necesarias", lo que abría la puerta a despidos, aunque la empresa declinó hablar de ERE.
En la reunión de hoy, los sindicatos plantearán que se restablezca la mesa negociadora constituida en enero para negociar el plan de viabilidad de la factoría, de la que salieron compromisos pactados como el de traer carga de trabajo --que se cumplió con el anuncio de la nueva furgoneta NV200-- y también el de reducir la plantilla a 2.800 personas.
Según explicaron fuentes del comité de empresa a Europa Press, la propuesta que trasladarán a la dirección del fabricante nipón en Barcelona es la de recuperar ese espacio de diálogo para "aportar ideas constructivas y nunca traumáticas", por lo que confiaron en que Nissan "no plantee ningún expediente que implique despidos".
"Esperamos que se contemplen nuestras propuestas", insistieron las mismas fuentes, que reconocieron que prolongar el plan de bajas voluntarias "puede ser una vía pero no la única", y abogaron por trabajar conjuntamente con la empresa como ya se hizo para garantizar el futuro de la planta barcelonesa.
