AURORA (CANADÁ), 16 Ene. (EUROPA PRESS) -
El fabricante de componentes para automóviles Magna ha dado a conocer sus previsiones para el cierre del ejercicio actual, que contemplan alcanzar un beneficio neto atribuido de entre 1.800 y 2.000 millones de dólares (entre 1.636 y 1.818 millones de euros).
Magna explicó que estas ganancias estimadas para 2020 representarán un retroceso de entre el 27,5% y el 12,8% en comparación con el beneficio neto atribuido contabilizado en 2018, que se situó en 2.296 millones de dólares (2.087 millones de euros). Los datos de 2019 se publicarán próximamente.
Para el cierre del año actual, la corporación estima alcanzar una cifra de negocio de entre 38.000 y 40.000 millones de dólares (entre 34.545 y 36.363 millones de euros), unos datos que también son inferiores a los resultados de 2018, cuando facturó 40.827 millones de dólares (37.115 millones de euros).
De cara a 2022, la multinacional con sede en Aurora espera registrar un volumen de ingresos de entre 40.500 y 43.500 millones de dólares (entre 36.818 y 39.545 millones de euros), lo que representará un aumento de hasta el 14% en comparación con las previsiones para 2020.
Magna señaló que estas estimaciones de beneficio neto y de facturación se enmarcan en un entorno en el que la producción de vehículos en Norteamérica se situará en 16,3 millones de unidades en 2020 y 2022, mientras que en Europa prevé un volumen de 20,8 millones de vehículos en 2020 y de 21,6 millones de unidades en 2022.
El consejero delegado de la empresa, Don Walker, afirmó que Magna espera que sus ventas continúen creciendo en el período contemplado, mientras que el director financiero, Vince Galifi, confirmó que la empresa seguirá invirtiendo para asegurar su crecimiento en el futuro.
