Expertos destacan que la DANA fue el episodio "más excepcional" en los últimos 30 años, con 2800 hm3 caídos en la cuenca
Expertos destacan que la DANA fue el episodio "más excepcional" en los últimos 30 años, con 2800 hm3 caídos en la cuenca - EUROPA PRESS - Archivo

Actualizado: miércoles, 23 octubre 2019 17:46

Alcaldes aseguran que después de estas inundaciones "ha habido un antes y un después"

MURCIA, 23 Oct. (EUROPA PRESS) -

Gobierno regional y administraciones locales coincidían este miércoles en subrayar los "brutales" daños de la DANA que afectó a 44 de los 45 municipios de la Región de Murcia el pasado mes de septiembre en el encuentro 'Ser: Y tras las inundaciones...¿Qué?'. Así como en subrayar la importancia del trabajo conjunto para dar solución a los daños de estos episodios "y para dar seguridad" a la población. "Se ha acabado el tiempo de los reproches", ha acentuado el Comisionado de las Inundaciones, el consejero de Fomento e Infraestructuras, José Ramón Díez de Revenga.

   El último panel del encuentro 'Y tras las inundaciones.. ¿Qué?', organizado por Radio Murcia-Cadena SER, denominado 'Soluciones' y moderado por el periodista Javier Ruiz, contaba con la participación de los alcaldes de Los Alcázares, Torre Pacheco, San Javier y Murcia, así el consejero de Fomento.

   En su intervención el alcalde de Los Alcázares, Mario Pérez Cervera, ha asegurado que no ha tenido tiempo a ver la realidad "que sufrimos ese día". "Teníamos los deberes hechos dos días antes de las inundaciones, en labores de prevención", pero lo ocurrido "fue brutal". Tras destacar las inundaciones de 2016, ha señalado que las lluvias de septiembre de 2019, demuestran que Los Alcázares "vive un constante peligro", cayeron 300 hectómetros, más de mil los rescates y 500 s desplazados, además de miles de viviendas y comercios afectados.

   Ha reconocido que el momento más duro fue la primera noche, rescatando a los vecinos de la zona que residían junto a la rambla de El Albujón, para continuar con los de la 'Zona cero', haciendo especial mención al hecho de que no podían acceder a los vecinos ni con los medios de la UME y que hubo que pedir ayuda ciudadana, "venían tractores de todas partes", así como "las llamadas que eran inmensas y muy duras". Incluso ha destacado que hubo que elegir "dónde mandar los vehículos". A pesar de todo, "queda la satisfacción más grande de que esa noche no falleció nadie".

   Después, Pérez Cervera ha pedido que todas las administraciones tomen en serio lo ocurrido y no lo dejen en el olvido, y ha lamentado que su municipio sea "el sumidero" de la Región.

UNIDAD DE TACTORISTAS DE EMERGENCIA

   El alcalde de Torre Pacheco, Antonio León, ha destacado que la UME no llegó a su municipio, sin embargo, "contamos con la Unidad de Tractoristas de Emergencia (UTE), que colaboraron desde el minuto uno". A la vez que ha querido resaltar solidaridad de vecinos, también de Cartagena, Murcia e incluso de fuera de la Región, que acudieron a ayudar días posteriores.

   A juicio del primer edil de Torre Pacheco, "después de estas lluvias, hay un antes y un después" y entre las soluciones a tomar ha subrayado, por ejemplo, la necesidad actualizar los mapas de inundabilidad y el trabajo conjunto entre todas las administraciones. Ha propuesto, también, recuperar la red de drenajes naturales de la cuenca, reordenar cauces y ramblas, y apostar por un urbanismo sostenible y riguroso.

   El alcalde de San Javier, José Miguel Luengo, ha señalado que "por desgracia, estamos entrenados" con las inundaciones de 2016 pero también por otros episodios ocurridos en 2018 "en los que nos vimos sobrecogidos".

   "Lo que está claro es que ahora están pasando con mayor frecuencia", poniendo de manifiesto el "desánimo" de los vecinos, "antes mirábamos al cielo esperando que lloviera y ahora lo hacemos con miedo". Lo más importante, ha acentuado, "es aprender de lo ocurrido, y salvaguardar la seguridad de los vecinos".

   Hay que "aunar esfuerzos, cada uno en sus competencias", ha señalado, y entre las soluciones ha incidido en que "todos somos responsables de una situación que se ha generado desde que se hizo la primera vivienda en San Javier". Se trata de "hacer un análisis, compatibilizar y entre todos hacer una política útil", ha afirmado, con la reflexión de que "cada uno haga lo que pueda pero si es entre todos, mejor" a fin de que "la población se sienta segura".

   Por su parte, el alcalde de Murcia, José Ballesta ha comenzado su intervención recordando las inundaciones de 1987, "dejando la reflexión de que deberíamos concienciarnos de nuestra propia inacción" con "la firme determinación de ejercitar medidas adecuadas para que la población no mire con miedo el cielo cada vez que se ponga gris".

   Ha destacado la evacuación de casi 400 personas "pero la mejor alegría es que hoy, no nos falta nadie". Pasado lo ocurrido, ha subrayado que todo el subsuelo de Murcia es una gran balsa "que ya no da más de sí", por lo tanto es "esencial" un interceptor de pluviales "que en la zona norte recoja todas esas aguas para verterlas en zonas más seguras como el río Segura", recordando que llevan más de dos años a la espera de su licitación para que comiencen las obras.

MEDIDAS EXCEPCIONALES

   Finalmente, el consejero y Comisionado de las inundaciones del Gobierno regional ha comparado la riada de Santa Teresa de 1987 en el que murieron 1.400 personas con un 10 por ciento menos de población y las de 2019, con ningún fallecido, "gracias a la labor de colaboración de todos y de los servicios de emergencias".

   Ha considerado que el Real Decreto del Gobierno de España se queda corto y que la Unión Europea tiene que tomar conciencia de lo ocurrido. Así, ha señalado que "la vuelta a la normalidad de los vecinos afectados por las inundaciones de septiembre pasa por establecer medidas estatales excepcionales que ayuden de verdad a los afectados que hayan sufrido daños en viviendas, comercios e instalaciones públicas".

   Según el consejero, "el actual decreto de subvenciones deja fuera las segundas residencias afectadas, así como los bajos, sótanos y garajes", y ha añadido que "para que una familia de cuatro miembros obtenga 2.500 euros para la reposición de todos los enseres perdidos en las inundaciones tiene que cobrar un máximo anual de 13.500 euros".

   Ha afirmado que "un temporal extraordinario exige medidas excepcionales" y que "los damnificados no entienden de gobiernos en funciones". "Consideramos que hay que realizar obras de amplio espectro, basadas en soluciones sostenibles, innovadoras e integradoras" para evitar daños en caso de desbordamientos, ha concluido Díez de Revenga.