El proyecto 'Housing First' en Murcia cumple un año de la mano de la Fundación Jesús Abandonado

Actualizado: sábado, 2 junio 2018 18:48

Personas sin hogar y con una trayectoria de calle de 20 años participan en este programa en el que colabora el Ayuntamiento y la CARM

MURCIA, 2 Jun. (EUROPA PRESS) -

Cinco personas sin hogar de Murcia, con una trayectoria de calle que supera los 20 años, han accedido a una vivienda para su inserción social y la normalización de sus vidas gracias al proyecto 'Housing First', que cumple poco más de un año en la Región y que desarrolla la Fundación Jesús Abandonado en colaboración con el Ayuntamiento de Murcia y la CARM.

El programa 'Housing First', la vivienda, lo primero, está financiado por el Ayuntamiento de Murcia en un 52,8 por ciento, los recursos de la Fundación en un 30,7 por ciento y los fondos de la CARM a través de la X Solidaria o casilla 106 de Actividades de Interés Social en la Declaración de la Renta en un 16,5 por ciento.

De los cinco participantes iniciales, cuatro permanecen en la vivienda, lo que supone un 80 por ciento de casos de éxito. Dos de los participantes en este programa llevan desde el inicio de su puesta en marcha, uno persona abandonó a los 296 días tras una trayectoria de 22 años en calle, y los dos últimos han entrado a las viviendas durante el primer trimestre de este año 2018.

Entre todos los participantes hacen una media de 18,6 años viviendo en la calle, siendo el que menos lleva diez años y el que más 28 años.

Este proyecto está vinculado con la intervención en la calle que realiza la Fundación Jesús Abandonado, donde visita a las personas sin hogar que pernoctan en la vía pública o se refugian en otros lugares como pueden ser cajeros o casas abandonadas. Así, se trata de que esa vinculación dé un paso más, accedan a una vivienda y puedan desarrollar una vida independiente. El modelo de intervención desarrollado con 'Housing First', pretende dar el apoyo y la estabilidad necesaria a personas con una larga trayectoria de sinhogarismo, con un perfil concreto, con las que la intervención convencional no ha funcionado, para que abandonen esa situación.

Se basa la idea de que la vivienda es un recurso residencial que se debe facilitar a las personas que se encuentran en situación de sin hogar, es decir, destinar una vivienda a la persona que está durmiendo en la calle. El perfil de las personas que participan en este programa es de una larga trayectoria de calle, con problemas de salud física o mental no diagnosticados precisamente por su situación, son perfiles muy cronificados.

En cuanto el acceso a recursos normalizados, tres de los cuatro participantes que actualmente siguen en el programa, acceden al médico de cabecera y a otros recursos médicos relacionados con problemas de salud física o mental, la mayoría de ellos tras su entrada en 'Housing First' o tras la intervención en el programa de calle. Asimismo, también participan en los diferentes programas de formación y empleo de la Fundación.

En las entradas a las viviendas cuatro de los cinco participantes mostraban problemas para realizar actividades de la vida diaria como poner una lavadora o utilizar el teléfono por ejemplo. Durante el transcurso del programa, el 100% ha conseguido realizar estas tareas con éxito.

El sistema se puso en marcha en Canadá y actualmente se ha extendido por todo el mundo con notable éxito, y en España se desarrolla ya en ciudades como Madrid, Barcelona o Valencia.

En el caso de Murcia, los usuarios son seleccionados por los profesionales de Jesús Abandonado y de los servicios sociales municipales, comprometidos a recibir una visita semanal de trabajadores sociales de la entidad benéfica, que les harán un seguimiento para garantizar su inserción social.

Fuentes de la Fundación Jesús Abandonado quieren subrayar que este programa supone un menor coste, una mejor atención y cuenta con una alta probabilidad de inclusión de la situación de estas personas. De hecho, cada seis días una persona sin hogar muere en un espacio público de España, sin contar las que mueren en hospitales u otras instituciones víctimas de su condición de sinhogarismo, según los datos de la Estrategia Nacional Integral para Personas Sin Hogar.

Según este documento elaborado en 2015, cada 20 días muere una persona sin hogar por violencia física en espacios públicos. En ese sentido, 34 por ciento de las muertes de personas sin hogar en España están relacionadas con un episodio de violencia, siendo el 23 por ciento de las muertes consecuencia directa de una agresión física.