MADRID, 16 Abr. (EUROPA PRESS) -
Uno de los responsables de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil declaró esta tarde en relación con el acusado Rafa Zouhier que, en una visita realizada a la cárcel tras su detención en relación con los atentados, éste "se echó a llorar cabizbajo" cuando le preguntaron si sabía algo relacionado con la masacre. "No dijo nada", explicó, y añadió que tampoco realizó referencias a Jamal Ahmidan, alias "El Chino".
El testigo detalló que aquella visita la realizó en compañía de dos agentes de la Unidad Central número 2 de la Guardia Civil que acudieron a prisión con intención de solicitar al acusado que enviara una carta al cuñado de José Emilio Suárez Trashorras, Antonio Toro, para convencerle de que colaborara con ellos. El miembro de la UCO indicó que una de sus funciones es precisamente realizar visitas a detenidos en cárceles para conminarles a colaborar con las autoridades.
Se refirió también a la nota informativa de su unidad en la que se señala que Zouhier comunicó a los agentes que conocía a dos asturianos que podía disponer de hasta 150 kilos de explosivos, redactada el 6 de marzo de 2003, un año antes de los atentados.
Dijo, por otra parte, que Zouhier comunicó datos a la UCO sobre "El Chino" de forma "voluntaria" y confirmó que el acusado incluso acompañó a miembros de su unidad a la calle Villalobos, donde residía Ahmidan. Recalcó, no obstante que "la mayoría de los informantes no suelen informar de todo".
INTERROGATORIO EL 11 DE MARZO
Durante la tarde, se produjo la declaración de un vecino del acusado Abdelmajid Bouchar, que conocía además al huido al que se considera muerto en Irak Mohamed Afalah. Jaouad El Bouzorouti, imputado en la causa pero finalmente no procesado, explicó que sobre las siete de la tarde del día 11 de marzo, la policía se presentó en su casa para realizar preguntas relacionadas con la masacre.
Los agentes le preguntaron aquel día si conocía a una de las personas que posteriormente se suicidó en la vivienda de Leganés, Alekema Lamari. Indicó que también conocía de su barrio en Marruecos los hermanos Moussaten y a su tío, el considerado autor intelectual de los atentados Youssef Belhajd.
Reconoció que prestó su vehículo a Afalah "durante un mes" y explicó que indicó en su declaración ante la policía que Bouchar regresó de un viaje a Bélgica "más radical" porque recibió malos tratos por parte de los agentes que le interrogaron.
Además, las citaciones de cuatro testigos Pablo Alvarez Moya, Zeimi Pardo, Rachid Bendouda y Mohamed Ouazzani, cuyas declaraciones estaban previstas para hoy resultaron infructuosas. Así el tribunal les citará para otro día. Por otra parte, Hatem Ghanouid, que también debía declarar hoy, se encuentra de viaje en Egipto y testificará una vez se produzca su regreso a España.
