Insiste en su propuesta de la carta de "derechos y deberes" de los inmigrantes y plantea "una red potente de oficinas" en origen
EL VENDRELL (TARRAGONA), 6 Jun. (EUROPA PRESS) -
El presidente de CiU, Artur Mas, aseguró hoy que con el nuevo Estatut aprobado y, en caso de llegar al Gobierno catalán en las próximas elecciones, CiU "impulsará la creación un cuerpo especializado de inspectores de trabajo" para que "luche sin tregua contra la contratación ilegal de inmigrantes", dado que la reforma estatutaria otorga la inspección de trabajo a la Generalitat de Cataluña. Además, propuso la creación "de una red potente de oficinas de contratación en origen" de la inmigración, "equivalente" al modelo del COPCA de sedes para la promoción de empresas catalanas en el extranjero.
Durante un acto de campaña en El Vendrell (Tarragona) para hablar de las competencias que el nuevo Estatut otorga en materia de inmigración, Mas advirtió 'a priori' que pretendía hacer "propuestas concretas" para la gestión de estas competencias, a riesgo de que "el presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, se ponga nervioso".
"Haremos propuestas aunque haya críticas" porque" hacen falta ideas claras sobre lo que se ha de hacer con el nuevo Estatut", afirmó Mas, quien consideró que, por el contrario, los socialistas "no hacen muchas" propuestas "porque están secos de ideas y no saben explicar qué harán con el Estatut".
Entre estas medidas, que incluirá previsiblemente el programa electoral de CiU para las próximas elecciones, Mas incluyó también su habitual propuesta del 'contrato con Cataluña' para los inmigrantes extranjeros, que CiU intentará incluir en la ley de Acogida de la Inmigración que el Parlament deberá aprobar como estipula el nuevo Estatut. Mas explicó que este "contrato" planteará a los inmigrantes que quieran trabajar en Cataluña "una serie de deberes a cumplir" en contrapartida con "los derechos" que le son "automáticamente otorgados".
"La gente que venga a trabajar a Cataluña ha de entender a dónde viene y qué somos, y ha de entender que para arraigarse en Cataluña hay una serie de deberes que cumplir", por lo que esta ley de acogida "ha de haber claramente un apartado de deberes que hay que cumplir" y "una vinculación clara entre la voluntad de adaptarse" a Cataluña "y los beneficios o contrapartidas que le otorga este arraigo", como ventajas y derecho, así como los perjuicios que podría ocasionarle una actitud contraria a ello, que Mas no quiso precisar y relegó a la campaña electoral de otoño.
"ACABAR CON EL SÁLVESE QUIEN PUEDA".
Mas apostó utilizar la "voz preeminente" que el nuevo Estatut le da a la Generalitat en materia de "regulación" de la inmigración en su territorio --no sólo de acogida-- para "acabar con el descontrol" en la gestión de la inmigración y el "sálvese quien pueda" que, según hoy, rige este fenómeno.
Para "pasar del descontrol actual al buen control" de la inmigración, Mas propuso también la creación "de una red potente de oficinas de selección en origen", que "no necesariamente deben ser compartidas con el Estado" --aunque admitió que eso "habrá que hablarlo" con la administración central--, del estilo de las que el último Gobierno de CiU ya abrió en Casablanca pero otorgándoles mayor fuerza para crear un modelo "equivalente" al del COPCA --para favorecer las exportaciones catalanas-- "que tan buenos resultados ha dado" y que "no se hizo tampoco con el Estado".
"Si nos salió tan bien esto, hay que intentar ahora crear una red equivalente de oficinas para poder comenzar a orientar y seleccionar bien la inmigración desde sus países de origen, de acuerdo con los sindicatos y empresarios que conocen las necesidades del mercado laboral" catalán, afirmó Mas, y explicó que en estas oficinas habría que informar al inmigrante de las característica de la sociedad catalana y del país al que va a viajar
La tercera propuesta del líder de CiU fue la "especialización de una parte" de la inspección de trabajo, que el Estatut transfiere a la Generalitat, en el seguimiento, control y lucha contra la contratación ilegal de inmigrantes "porque la gente ha de entender que este tipo de contratos perjudican no sólo a los inmigrantes sino también a la sociedad catalana". "Para luchar contra estos fenómenos son necesarios instrumentos y CiU usará a fondo los que le da el Estatut, como la inspección de trabajo", insistió.
Mas planteó estas medidas para "acabar con la sensación de descontrol" en materia de inmigración que existe hoy y destacó que estas posibilidades son "un motivo importante para decir que 'sí' a este Estatut", que en contraposición con el de 1979 en materia de inmigración "es como la noche y el día".
Mas recordó que en el Estatut de 1979 no hay ni una sola referencia a los temas de inmigración, "sólo para decir que el Gobierno catalán no puede intervenir sino que es competencia única y exclusiva del Gobierno central", mientras que el nuevo texto otorga a la Generalitat "competencias exclusivas en la acogida de inmigrantes" --que se detallarán en una futura ley del Parlament-- y cede al Gobierno catalán la capacidad de otorgar los permisos de trabajo y las responsabilidades en inspección laboral.
"Pasamos de ser un invitado de piedra a ser agente activo, de ser un extra de la película a ser actores principales en la inmigración" y "de no tener voz a ser una voz principal" en materia de inmigración, señaló Mas, en una rueda de prensa en la plaza Nova de El Vendrell a la que asistieron, además de los periodistas, decenas de vecinos del municipio --prácticamente todos jubilados-- que aplaudieron a Mas al finalizar su discurso.
DESVINCULA LA INMIGRACIÓN Y LA SEGURIDAD EN UN ACTO EN TARRAGONA.
Pese a la irrupción de uno de ellos que exigía a Mas que "hablase también de las pensiones", en su mayoría, los vecinos escucharon atentos la explicación y varios de ellos saludaron después personalmente al líder de CiU, que había escogido este entorno para tratar el tema de la inmigración consciente de que se trata de una cuestión que preocupa mucho en El Vendrell, donde el 13% de la población es inmigrante --el 70% de ella norteafricana-- y donde el partido de tendencia racista y xenófoba Plataforma per Cataluña ha conseguido incluso un concejal en el Ayuntamiento.
Aunque Mas desvinculó "inmigración y seguridad" señalando que "son dos cuestiones distintas", reconoció que "muchas veces la delincuencia va ligada a la pobreza" y que parte de las redes de delincuencia organizada que operan en Cataluña --y que "no tienen nada que ver con la pobreza"-- "pueden funcionar porque se mira hacia otro lado cuando se contratan inmigrantes ilegales". Por ello, señaló que "vigilando la contratación y con una lucha sin tregua contra ella se podrá erradicar también determinadas bolsas de pobreza que están en la sociedad.
