El PP afirma que Hereu está obligado a dialogar, y aprovecha para lamentar "la capucha política de ETA" en ayuntamientos vascos
BARCELONA, 16 Jun. (EUROPA PRESS) -
El líder de ERC en el Ayuntamiento de Barcelona, Jordi Portabella, prometió hoy una oposición "constructiva" y "coherente con unos valores", ahora que dejan de ser socios de gobierno tras ocho años como socios de los alcaldes socialistas. "No nos opondremos a todo", aseguró.
En su discurso durante la constitución del Consistorio, Portabella afirmó que su oposición será constructiva "porque cada paso requiere un consenso" para el "bien común". Así, prometió "lealtad absoluta hacia la ciudad y su gente", para contribuir a la confianza de la gente en las instituciones.
Entre los valores que defenderá su grupo, defendió los elementos que definen la sociedad barcelonesa y el catalanismo. De hecho, defendió la capitalidad catalana de Barcelona y dijo que "Barcelona y Catalunya van juntas", de manera que "lo que es bueno para una es buena para otra". Asimismo, pidió "fortalecer" la lengua y cultura catalanas.
Jordi Portabella felicitó a Jordi Hereu como alcalde y dijo que ERC considera necesario "trabajar día a día" y, a la vez, dotar a la ciudad de "un modelo capaz de generar ilusión y compromiso colectivo".
Afirmó que sería un error "prolongar un modelo de ciudad que ha sido de éxito, justamente porque ha sido de éxito", ya que las condiciones actuales "ya no son las mismas".
Dijo que el presente viene marcado por "los efectos locales" de la globalización, y pidió por ello la "capacidad de reinventarse" que "tradicionalmente ha tenido" Barcelona. Según él, esta ciudad tiene "una buena posición de salida" para conseguirlo.
Portabella añadió que la cohesión social será la clave de todo, por la inmigración, los servicios, la seguridad y otros factores, incluida la participación ciudadana: "Todos hemos perdido votos", advirtió tras constatar la alta abstención de las elecciones municipales.
CONTAR CON LA OPOSICIÓN.
El líder del grupo de CiU, Xavier Trias, empezó su discurso felicitando a Hereu, al PSC y a todos los concejales, pero consideró que "han tomado una decisión equivocada: gobernar en minoría". Añadió que "el alcalde tendrá la gran responsabilidad de contar con la oposición".
Definió Barcelona como "una ciudad de éxito", aunque se preguntó "de quién" es ese éxito, porque debe saber gestionarse esa posición alcanzada. Para él, "se ha ido pervirtiendo y degenerando" ese modelo de ciudad. En cuanto a la ya pasada legislatura, constató un fracaso del Fòrum de les Cultures, falta de servicios "de calidad" e inseguridad ciudadana, entre otros problemas, además de la carencia de una financiación "justa".
Por todo ello, reclamó cambiar el modelo de ciudad, tras "28 años gobernando los mismos", y dijo una vez más que cree "en un cambio de modelo". Aseguró que la abstención de las elecciones municipales lo justifica.
Xavier Trias se mostró dispuesto a "liderar" este cambio pese a no ser alcalde, porque lo cree posible desde la oposición, que prometió "constructiva" pero "exigente", aunque con "mano tendida" a "todos" los grupos. "Sobre todo, buscaremos acuerdos con aquéllos que quieran un cambio" como lo defiende CiU.
Trias, como Portabella, defendió la capitalidad catalana de Barcelona, y después pidió "colaboración" de esta ciudad con las otras, empezando por las de su entorno, y apostó por recuperar el Área Metropolitana de Barcelona.
"El alcalde tendrá una gran responsabilidad para saber contar con la oposición", dijo, y lamentó que Hereu haya empezado "con gestos propios de mayoría absoluta", en alusión al acto en que participó para anunciar el "lamentable" retraso del AVE entre Barcelona y la frontera francesa.
PP: EL "OCASO" DE LOS TRIPARTITOS.
Alberto Fernández Díaz (PP), tras felicitar al alcalde, le advirtió de que "cuando se gobierno en minoría, el diálogo es una obligación". Constató "una oposición mayoritaria" en el pleno, y una victoria "tan mínima" que el tripartito "ya se ha convertido en bipartito", lo que consideró el principio del "ocaso" de los tripartitos de izquierdas.
Fernández dijo que su oposición consistirá en "ofrecer alternativas" y, a la vez, de apoyar las iniciativas de gobierne que considere, y constató como tradicional la contribución del PP a la gobernabilidad de Barcelona.
Afirmó que Barcelona necesita acordar con las administraciones estatal y autonómica una mejora de la financiación. También dijo que la ciudad necesita "más que nunca" el "liderazgo" de su alcalde.
El concejal popular dijo que hay dos barcelonas: la de modernidad, reconocida en el mundo, y "la cotidiana", que "en demasiadas ocasiones, el Ayuntamiento ha descuidado".
Constató también el "agotamiento" del modelo de ciudad surgido por los Juegos Olímpicos organizados en 1992 y lamentó que quede tan "lejos" la "vocación transformadora" de los ayuntamientos de izquierda en la transición democrática.
Por otra parte, el dirigente del PP lamentó que "la capucha política de ETA" tome posesión de cargos electos en algunos ayuntamientos vascos tras las elecciones municipales.
