Admite que los ataques internos tienen un efecto "demoledor" y "todos" los aliados están comprometidos a resolver el problema
BRUSELAS, 10 Oct. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Defensa, Pedro Morenés, no ha descartado este miércoles acelerar de forma significativa el repliegue de las tropas españolas de Afganistán si la situación de seguridad lo permite y se hace en coordinación con el resto de aliados, aunque ha rechazado que España complete la retirada total antes de 2014.
El Gobierno tenía previsto retirar el 10% de sus 1.500 efectivos en Afganistán este año, el 40% en 2013 y el resto en 2014.
Sin embargo, después de que el comandante de la misión en Afganistán, general estadounidense John Allen, y el nuevo ministro de Defensa, Bismillah Jan Mohammadi, hayan presentado este miércoles resultados sobre la situación sobre el terreno "muchísimo mejores" de los que percibe la opinión pública e informan los medios de comunicación, Morenés ha considerado "buenas noticias" el hecho de que "podamos quizá adelantar el repliegue español en función de esa nueva situación, que vamos viendo día a día".
"Si eso sigue así en las provincia de Bagdhis y en la zona de Herat (donde está desplegado el grueso de las tropas españolas) nosotros seríamos capaces de cambiar el 10, 40 y 50. Igual se podrían adelantar", ha apostillado, sin avanzar cifras concretas.
Morenés ha justificado que es "muy prematuro" porque "establecer un calendario es muy complejo" con distintas variables que entran en juego.
"Tengo la impresión de que, si seguimos como estamos, puede ser no una cosa insignificante, sino una cosa que tenga un peso desde el punto de vista de nuestra presencia", ha explicado.
Eso sí, ha avisado de que "cualquier acción que nosotros tomemos de repliegue tendrá que tener dos características". "La primera es que no afecte a la seguridad de nuestra gente de ninguna manera y la segunda, que esté consensuada y coordinada con el criterio de repliegue de las propias fuerzas de ISAF", ha explicado el ministro en rueda de prensa al término de la reunión de los ministros de Defensa informal de la OTAN.
España descarta en todo caso acometer el repliegue total antes de 2014 tras recordar que los aliados y socios que contribuyen a la actual misión en Afganistán han confirmado de nuevo el principio de "dentro juntos, fuera juntos", según ha explicado Morenés. "El adelanto del año 2014 no lo veo", ha explicado.
Los países de la OTAN han pactado con Kabul entregar la responsabilidad de todo el país a finales de 2014. Para garantizar que hay suficiente tiempo a completar el proceso, los aliados esperan que las fuerzas afganas asuman a mediados de 2013 las operaciones de combate en todo el país y ejerzan ya la principal responsabilidad de la seguridad.
NUEVA TÁCTICA PREOCUPANTE DE LA INSURGENCIA
Morenés ha dejado claro que los aliados son conscientes de que "siempre pueden verse afectados por una situación imprevista" pero están "particularmente comprometidos a resolver" el problema "demoledor" que representan los ataques internos, "la nueva táctica de la insurgencia" y ha rechazado el despliegue "inmediato" de helicópteros de ataque Tigre.
Los ataques internos, ha admitido el ministro, "tienen un efecto realmente demoledor desde el punto de vista de la explicación pública del asunto" aunque ha descartado que supongan un "peligro estratégico" para la misión aunque sí envían un mensaje "demoledor" de "deslealtad". Más de 53 militares internacionales han muerto este año a manos de las fuerzas afganas.
"Pero estamos tratando de que esas situaciones imprevistas no nos afecten ni a nosotros ni a nuestro aliados", ha asegurado.
El ministro ha explicado que el jefe de Estado Mayor de la Defensa tiene "un especial encargo y cuidado" de aplicar no sólo las normas de seguridad reforzadas por la OTAN sino también las normas españolas, sin entrar en detalles.
NUEVA MISIÓN REQUIERE BASE LEGAL SUFICIENTE
De cara a la nueva misión de entrenamiento, asesoramiento y asistencia a las fuerzas afganas que la OTAN ha acordado mantener sobre el terreno desde 2015,cuando termine la misión actual de combate, Morenés ha asegurado que España está dispuesta a participar en la nueva misión. "Tenemos que contar con una base legal suficiente para poder estar ahí", ha explicado.
Morenés ha dejado claro además que la nueva misión será "distinta" a la actual en cuanto a "su cantidad, esfuerzo personal y económico" dado que ya no será una misión de combate. Ha avanzado que España estaría dispuesta a apoyar "en su caso" el asesoramiento de las fuerzas afganas o en áreas en las que ya tiene experiencia sobre el terreno, por ejemplo para garantizar el funcionamiento del aeropuerto de Herat.
