BENALMÁDENA (MÁLAGA), 10 Oct. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Benalmádena (Málaga), Enrique Bolín, presentó ayer una querella contra los cinco concejales del grupo municipal del PSOE por "injurias graves", ya que compararon los escándalos de Marbella con la gestión del primer edil de la localidad.
Bolín expresó que se trata de "la primera vez que me querello contra miembros de la oposición, pero no puedo seguir consintiendo que sigan dañando impunemente a la imagen de Benalmádena con meros fines electoralistas o como cortina de humo para ocultar lo que está haciendo este partido en otros municipios".
La querella fue presentada en los Juzgados de Instrucción de Torremolinos tras varios meses de estudio y recopilación de información, según precisaron desde el Ayuntamiento en un comunicado.
El alcalde apuntó que "estoy acostumbrado desde hace años a constantes ataques difamatorios, que, en muchos casos, llegan a mi ámbito personal y a decenas de denuncias que finalmente son archivadas", pero se mostró sin embargo "especialmente indignado por el contenido difamatorio en su totalidad" de un comunicado emitido por el PSOE local.
Entendió que esta nota "recogía unas 34 irregularidades, lo que es un tercio de aquellas más de cien que decían, y estaba plagada de errores y repeticiones", al tiempo que indicó que el PSOE "otorgaba categoría penal a varias diligencias previas".
"Los concejales saben que no pueden entenderse como irregularidades en el sentido penal que pretenden conferirles, porque en realidad son una discusión entre distintas administraciones sobre la aplicación de un determinado criterio o norma urbanística", señaló.
Para el letrado que remitió la querella al juzgado, Antonio Jurado, "es evidente que los querellados han querido causar en la opinión pública una alarma social en desprestigio del alcalde". Así, la querella criminal por injurias graves va dirigida contra los cinco concejales del PSOE en el Ayuntamiento, Reyes López Bilbao, María del Carmen Florido, Alejandro Lacal, Antonio Martín y Juan Cañete.
Por último, Bolín considera que los "constantes ataques hacia su persona pretenden establecer un juicio mediático para ganar en los medios de comunicación lo que nunca han podido ganar en las elecciones" y que, además, "últimamente, con burdas y ruines mentiras, están afectando gravemente a la imagen de Benalmádena, especialmente a la credibilidad de la administración local y a sus funcionarios, cuyo trabajo es impecable", concluyó.
