MADRID, 30 Sep. (EUROPA PRESS) -
Unas cien personas secundaron hoy en Madrid la convocatoria de Amnistía Internacional (AI) en favor del fin de la represión de la Junta Militar contra las manifestaciones prodemocráticas y el respeto a los Derechos Humanos en Birmania, así como la inmediata liberación de los presos de conciencia, entre los que se encuentra la premio Nobel de la Paz y dirigente opositora Aung San Suu Kyi.
La ONG emplazó, además, al Consejo de Seguridad de la ONU a adoptar medidas de presión, tales como embargos de armas, y a enviar una misión para informarse de la situación sobre el terreno.
La concentración tuvo lugar en la madrileña plaza del Callao bajo el lema "¡No más represión a las protestas pacíficas! y ¡libertad para los presos de conciencia!". También se realizaron concentraciones y actos en otras ciudades del mundo como Manila, Santiago de Chile, Washington o Bruselas.
"Queremos solidarizarnos con las personas que están tratando de ejercer su derecho a manifestarse pacíficamente en Birmania y están sufriendo una violenta represión por todo ello", declaró a Europa Press la responsable de Campañas e Investigación de AI en España, Eva Suárez-Llanos.
La ONG aprovechó para recordar que Birmania vive en una alarmante situación en la que son vulnerados frecuentemente los Derechos Humanos. AI denunció la utilización de niños soldados y el trabajo forzoso, la vigencia de leyes que criminalizan la expresión pacífica de la disidencia política --existen, según la ONG, más de 1.160 presos políticos--, la detención sin orden judicial, en régimen de incomunicación, y la frecuencia de prácticas de tortura, tratos crueles, inhumanos y degradantes.
"Queremos recordar a las autoridades de Birmania que deben poner fin de inmediato a esta represión y a la comunidad internacional que debe lanzar un mensaje claro de que sucesos tan graves como los de 1988, cuando unas 3.000 personas perdieron la vida en un contexto similar de tensiones y protestas no van a ser tolerados", dijo Suárez-Llanos.
AI apeló a la ONU y a los países del entorno para que presionen al régimen birmano. "Hacemos un llamamiento al Consejo de Seguridad para imponer un embargo de armas absoluto a Birmania y para hacer todo lo posible con medidas inmediatas y urgentes para acabar con esta situación", declaró Suárez-Llanos. "Hacemos un llamamiento especial a países como China, Japón o India, que tienen una especial influencia con Myanmar y pueden hacer llegar este mensaje a las autoridades de que esta situación no va a ser consentida", concluyó.
APOYO DEL PSOE
El PSOE apoyó la reivindicación de Amnistía en Madrid con la presencia de su secretario de Movimientos Sociales y Relaciones con las ONG, Pedro Zerolo. "Apoyo a esta iniciativa de Amnistía Internacional contra la violencia, en favor de la libertad, del respeto a los derechos civiles, a las libertades públicas y a los Derechos Humanos", declaró.
"Me sumo como miembro de la ejecutiva federal del PSOE a esta iniciativa que pretende hacer un llamamiento internacional en muchas ciudades del mundo para que el Consejo de Seguridad tome cartas en el asunto de forma clara y contundente", explicó. El dirigente socialista mencionó explícitamente a la necesidad de que se impliquen países como China o Rusia, "que algo tienen que decir en esta cuestión y no están haciendo todo lo posible".
Ayer mismo, la secretaria de Relaciones Internacionales del PSOE, Elena Valenciano, apeló a la solidaridad y al apoyo decidido de todos los actores implicados. "La Comunidad Internacional, los países asiáticos más influyentes, pero también el conjunto de la sociedad mundial, debe responder de inmediato a la población birmana, que lleva décadas sufriendo la represión y la violación de sus derechos fundamentales. Todos tenemos la obligación de ayudarles a alcanzar la democracia y su libertad", dijo.
