Pide que el 30 por ciento de lo que recaude a través de los impuestos que se destinen al citado Fondo sea gestionado por la Comunidad.
PALMA DE MALLORCA, 9 Ene. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Govern, Francesc Antich, reclamó ayer al presidente del Ejecutivo central, José Luis Rodríguez Zapatero, que la aportación de Baleares al Fondo de Garantía de los Servicios Públicos Fundamentales, que se creará en el nuevo modelo de financiación, "no supere el 70 por ciento", con el fin de que la capacidad fiscal autónoma sea "suficiente para atender las necesidades básicas de las islas".
Tras la reunión del Consell de Govern, el conseller de Economía y Hacienda, Carles Manera, explicó que en la reunión mantenida ayer con Zapatero para negociar el nuevo sistema de financiación, Antich le entregó un documento en el que le plantea que el 30 por ciento de lo que Baleares recaude a través de los impuestos que se destinen al citado Fondo de Garantía sea gestionado por la Comunidad.
Manera explicó que este Fondo estará compuesto por aportaciones adicionales del Estado, aún sin concretar, y por el porcentaje de las aportaciones recaudadas por las Comunidades Autónomas a través de una serie de impuestos, que también están sin determinar, con el fin de garantizar que todos los territorios cubran sus necesidades de financiación en materia de sanidad, educación y servicios sociales.
El conseller recalcó que el Govern ha solicitado no aportar al Fondo más del 70 por ciento de lo recaudado a través de los impuestos que sirvan para sufragarlo, debido a que, según recordó, Baleares es la Comunidad Autónoma con mayor esfuerzo fiscal, al superar en un 20 por ciento la media estatal y, por lo tanto, le conviene que revierta en las islas el mayor porcentaje posible del dinero recaudado a través de los impuestos.
Manera indicó que Comunidades con un gran esfuerzo fiscal como Cataluña han propuesto aportar al Fondo de Garantía sólo el 65 por ciento de lo recaudado a través de los impuestos, mientras que por el contrario, territorios con menor esfuerzo fiscal han planteado a Zapatero destinar el 90 por ciento, de forma que sólo el 10 por ciento restante sea controlado por la Comunidad Autónoma.
Por otro lado, detalló que a través de este Fondo, las Comunidades Autónomas y el Estado garantizarán la denominada "nivelación horizontal", que consiste en "igualar la convergencia regional en financiación", con el objetivo de que todos los territorios, con independencia de lo que recauden a través de los impuestos, tengan garantizados unos servicios públicos de calidad.
El conseller remarcó el Ejecutivo central aún no ha concretado ninguna cifra del nuevo sistema de financiación, ni los fondos adicionales que aportará, si bien recordó que durante el encuentro de ayer, Zapatero admitió que Baleares es la Comunidad Autónoma peor financiada y, por tanto, se comprometió a que las islas sean las más beneficiadas con el nuevo modelo.
"NINGUNA COMUNIDAD PUEDE CANTAR VICTORIA"
No obstante, insistió en que hasta que el Gobierno no concrete las cuantías adicionales ninguna Comunidad Autónoma "podrá cantar victoria" y, en este sentido, consideró "urgente" que el Estado determine de qué forma se ponderará el criterio de la población en el nuevo sistema, de forma que concrete si se tendrá en cuenta la población ajustada al Padrón real o el crecimiento relativo de los ciudadanos que viven en una Comunidad Autónoma.
Por otra parte, resaltó que Baleares también se verá beneficiada con el Fondo de Competitividad, destinado a aquellas Comunidades, cuya financiación global per cápita esté por debajo de la media o por debajo de su capacidad fiscal, tal como sucede también en Cataluña y Madrid. Sin embargo, admitió que Antich desconoce si esta convergencia será "inmediata o si tendrá una gradación temporal".
"En un plazo de entre 10 o 15 días, el Gobierno central comenzará a dar las primeras cifras para iniciar la tercera fase del proceso negociador, de forma que en febrero se llevará a cabo la negociación multilateral en el Consejo de Política Fiscal y Financiera para cerrar el nuevo sistema de financiación", explicó Manera, al tiempo que avanzó que a partir del próximo lunes, "proliferarán las reuniones bilaterales entre el Ministerio de Hacienda y las diferentes Comunidades.
Preguntado por los 700 millones de euros de financiación anual que reclaman UM y el Bloc, el conseller reconoció que es "difícil" apuntar una cifra sin conocer aún los recursos económicos adicionales que aportará el Estado al nuevo modelo. Además, recordó que los únicos datos que conoce son los que aportó el Círculo de Economía, que calcula que el archipiélago percibirá una financiación anual, que oscilará entre los 390 y los 700 millones de euros.
EL ESTADO DEBERÁ AUMENTAR SU DEUDA
Por otra parte, Manera sostuvo que para hacer frente al nuevo sistema de financiación, el Estado deberá endeudarse, con el fin de aportar recursos adicionales y, en este sentido, recordó que la deuda pública se sitúa en el 40 por ciento del PIB, mientras que la Unión Europea permite un máximo de un 60 por ciento.
En esta línea, abogó por que las Comunidades Autónomas peor financiadas, como Baleares (un 21 por ciento por debajo de la media española en términos per cápita) puedan transferir sus respectivos déficits al Gobierno central, ya que el Estado aún tiene margen para incrementar su endeudamiento en un 20 por ciento.
De esta forma, Manera remarcó que "cuanto más recursos adicionales ponga el Estado, más facilidades tendrán las Comunidades para resolver sus problemas" y, por otro lado, reiteró que el actual sistema de financiación es "injusto" con Baleares, teniendo en cuenta que se estableció bajo criterios poblacionales de 1999 y, desde entonces, la población se ha incrementado en un 30 por ciento en las islas.
Finalmente, Manera insistió en que Antich está "alegre" por el hecho de que Zapatero "reconozca esta situación y quiera corregirla" y añadió que el PP balear está diciendo lo contrario que su líder nacional, Mariano Rajoy, quien "ya ha dicho que no quiere cambiar el modelo de financiación".
