Insiste en que Ferraz respaldará plenamente a Patxi López y evita valorar el impacto en la gobernabilidad de España
MADRID, 2 Mar. (EUROPA PRESS) -
El vicesecretario general del PSOE, José Blanco, aseguró hoy que el PSOE quiere un Gobierno en el País Vasco que apueste por la superación de frentes, que promueva el cambio y no descartó que pueda ser un gobierno en solitario, aunque matizó que dependerá del diálogo que se establezca con el resto de fuerzas políticas.
Blanco esquivó la pregunta de si entendería que un gobierno PSOE-PP podría ser un gobierno frentista, y se limitó a recalcar que la apuesta de los socialistas es lograr un gobierno que apueste "por la convivencia y por la superación de los frentes". "Es nuestro objetivo", apostilló y añadió que a ello "están convocados todos los que quieran superar un momento político que debería haber quedado atrás como consecuencia de este resultado electoral".
Lo que sí señaló José Blanco es que el PSOE está "en condiciones de poder liderar un gobierno de cambio en solitario". Aunque después matizó que, en todo caso, el resultado "tendrá que ser fruto de la expresión de las demás fuerzas políticas" y del "diálogo que se establezca". "Es muy apresurado prejuzgar lo que va a ocurrir", insistió
En rueda de prensa en la sede socialista de Ferraz, después de una reunión de la Comisión Ejecutiva Federal del PSOE, Blanco insistió además en que la dirección federal apoyará todos los pasos que dé el secretario general del PSE y candidato a lehendakari, Patxi López.
Así, incidió en que los socialistas vascos han resultado los "depositarios de una gran confianza popular" y que por lo tanto les corresponde a ellos "traducir" esa confianza en decisiones políticas, con todo el "respaldo" de Ferraz. "El resultado electoral que han obtenido los socialistas vascos lo van a gestionar los propios socialistas vascos", remachó.
IMPACTO EN LAS CORTES
Blanco evitó en todo momento aventurar quiénes podrían ser socios de gobierno de López en Euskadi. Tampoco valoró qué consecuencias podría tener ese mapa en la gobernabilidad de España y en los apoyos que pueda sumar el PSOE en el Congreso de los Diputados, donde hasta ahora ha tenido el apoyo del PNV en votaciones clave.
Tras las elecciones de ayer, el PNV sigue siendo el partido más votado y obtiene 30 escaños en la Cámara de Vitoria, pero el PSE, con 24 --o 25 en función del voto exterior-- puede desbancarle con el apoyo del PP --13 escaños-- y UPyD --un escaño--.
PSE NO DECIDIRÁ EL FUTURO DE IBARRETXE
Remitiéndose siempre a lo que decida López, Blanco no respondió tampoco si el PSE podría apoyar un gobierno del PNV si éste no está dirigido por Juan José Ibarretxe. Además, en este punto incidió en que el futuro de Ibarretxe no lo decidirá el PSE, sino, "en todo caso, "el PNV".
En todo caso, el dirigente socialista subrayó que la alternancia es esencial en democracia y, auque no es "obligatoria", "tiene que ser posible y hoy en Euskadi lo es". "El resultado abre la posibilidad de que el próximo lehendakari sea Patxi López y él ha dicho que no renuncia a presentar su candidatura", recordó.
El 'número dos' del PSOE inició su comparecencia destacando que en el País Vasco se vivió una "campaña completamente normal" en la que el terrorismo de ETA "no ha conseguido irrumpir" ni tampoco condicionarla, y subrayando el "éxito político sin precedentes" de los socialistas vascos.
A su juicio, el resultado "confirma el camino ascendente" que los socialistas vascos empezaron en 2005 y demuestra que han seguido una "línea política acertada que sintoniza con las opiniones de la sociedad vasca y del momento político".
Blanco opinó que el resultado demuestra que los vascos quieren "cambio" y "convivencia" y se mostró convencido de que cualquiera que sean las decisiones que tome a partir de ahora López irán encaminadas a "ese doble afán" que comparten los "socialistas de toda España". "Tenemos la determinación de promover el cambio en correspondencia con lo que expresaron los electores", manifestó Blanco.
