(Ampl).- Zapatero augura que la derecha ni "derogará" los Estatutos ni "devolverá la estatua de Franco a su pedestal"

Actualizado: domingo, 23 abril 2006 18:00

Convoca al PP a que apoye y se sume al consenso en la Ley de Dependencia y en la de Igualdad

MADRID, 23 Abr. (EUROPA PRESS) -

El presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, defendió hoy, en el Palacio madrileño de Vistalegre, que la "derecha", que "siempre ha tenido a España en la lista de espera", ni derogará "los estatutos de autonomía" ni "devolverá la estatua de Franco a su pedestal".

Así, y en alusión a los dirigentes del PP, subrayó que aunque ejerzan como "profetas del desastre", son un "desastre como profetas" y les convocó a que apoyen y se sumen al consenso de dos normas: la Ley de Autonomía Personal y la de Igualdad. También destacó que para gobernar la diversidad hay que "respetar, entender y no provocar el enfrentamiento"

Ante más de 20.000 militantes y simpatizantes del PSOE en el inicio de la campaña del partido del segundo año de gobierno socialista, Zapatero comenzó su mitin dando las gracias al secretario de Organización del PSOE, José Blanco, por su "trabajo".

Tras valorar la presencia del líder de UGT, Cándido Méndez, dio las gracias a los presentes por su "confianza" pero sobre todo, por su "fuerza". "Fuerte no es el que más insulta, ni grita, ni amenaza, sino el que tiene convicciones profundas y las defiende con templanza --enfatizó--. Fuerte es quien dialoga y escucha, comparte ideas y trabajo por nuestro país. Habéis sido fuertes. Hemos sido fuertes".

El líder socialista expresó que en esta campaña de acción de gobierno que hoy inician explicarán sin "temor" a la ciudadanía lo hecho. "No vamos a caer en la autocomplacencia ni a dormir en los laureles, pero tampoco nos van a arrebatar la satisfacción por el trabajo hecho", destacó.

Como esencia del proyecto socialista defendió la "democracia de los ciudadanos". A continuación el líder del PSOE indicó que, a su juicio, su Gobierno no ha actuado de forma apresurada aunque "algunos hayan dicho" que han ido "deprisa y tomado demasiadas decisiones".

De esta manera, comentó que ni precipitada fue la retirada de tropas de "una guerra ilegal", en referencia a Irak, ni aumentar la capacidad adquisitiva de quienes cobran el salario mínimo, las pensiones o las becas. Tampoco, expuso, es ir deprisa liberar suelo para viviendas de protección, elevar la inversión en I+D+I, haber elaborado una Ley para luchar contra la violencia de género y el "machismo intolerable y criminal", o convertir a "personas iguales a aquellos con otra orientación sexual".

"Estamos a la mitad de la octava Legislatura de la democracia y en ocho se ha cambiado el destino histórico de España", dijo entonces, destacando que se ha entrado en la "vía" de la "libertad y el progreso". "A ella hemos contribuido mucho. Bien lo sabe Felipe González", remarcó en presencia del ex jefe del Ejecutivo.

ALTA VELOCIDAD.

Reconoció que "en esta vía, ha habido gobiernos de distinto signo". "Pero cuando gobierna el PSOE, la vía de progreso es de alta velocidad". "No es que vayamos deprisa, es que otros siempre se quedan atrás --comentó--. Otros que nos hicieron esperar muchas cosas, la extensión de la educación a toda la ciudadanía, la sanidad pública, las pensiones no contributivas, los derechos como el divorcio, nos hicieron esperar demasiadas cosas. Ahora hemos tenido que esperar para ver por fin la televisión plural y al servicio de todos".

Entonces se preguntó por qué sucede esto, con la siguiente respuesta: "La derecha ha tenido siempre a España en la lista de espera. Por eso cuando gobierna la izquierda, hay que apresurar el paso, porque lo que hagamos ahora, hecho estará, quedará y nadie lo va a cambiar".

Bajo esta argumentación, expuso que ni derogaron las pensiones contributivas, ni el divorcio. Y pidió a los presentes que "ahora" estén "atentos" porque pasará "lo mismo". "Nunca se volverán a atrever a apoyar una guerra ilegal, no derogarán los Estatutos de Autonomía, la ley del matrimonio de homosexuales, no devolverán la estatua de Franco a su pedestal", vaticinó, resaltando que también dirán que muchas reformas han sido obra de ellos.

DESASTRE COMO PROFETAS.

En este punto, dijo querer que se se sumen a las reformas con buen talante porque los socialistas están "deseando" que recuperen "el tiempo perdido que hicieron perder a España", animándoles a sumarse a una "política constructiva". "La cuestión es que además, ahora ejercen de profetas del desastre --agregó--. Son un desastre como profetas".

Con este punto de partida, Zapatero citó el crecimiento económico de España, el haber empleado a 1,7 millones de personas y se marcó el objetivo de que en 2007 la tasa de paro femenina se sitúe en la media europea. Además, apostó por mantener el equilibrio fiscal y el superávit.

CATALUÑA, QUERIDA POR "TODA ESPAÑA".

Recalcó que las reformas de los Estatutos "servirán para gestionar mejor los asuntos públicos y que muchas decisiones estén más cerca de la gente". "Atención. Dentro de unos años, los que hoy dicen que había riesgo la cohesión de España, se echarán en brazos también de los Estatutos de nueva generación".

Manifestó que la "diversidad" de pueblos o lenguas no da "miedo" a quien tiene confianza en la democracia y en la gente. Mostró su orgullo por la "diversidad" y por estar "juntos 17 banderas de 17 comunidades autónomas". "¿O es que acaso cuando la Junta de Andalucía gestiona competencias no está gestionando un gobierno español y de España y para España, como son los gobiernos de las Comunidades Autónomas?", se preguntó en presencia del presidente de la Junta, Manuel Chaves.

"Para gobernar la diversidad lo que hay que hacer es respetar, entender y no provocar el enfrentamiento, ni con Cataluña, a la que toda España quiere". "Vamos a estar más unidos y no sólo los pueblos, sino los españoles y lo que une a los españoles, que es la igualdad de derechos", proclamó.

DE CRISPACIÓN A COOPERACIÓN LEAL.

Tras citar la la lucha por la paz, la extensión de los derechos sociales y ciudadanos y el buen gobierno, el presidente enumeró las "tareas" de la segunda parte de la legislatura, esto es, "hacer aún más fuerte la democracia y España y extender aún más los derechos sociales y ciudadanos de todos los españoles, convocar a la convivencia y armonía territorial y mejorar en el buen gobierno".

El líder socialista deseó que en esta segunda mitad de su mandato cambie "la atmósfera política" y que la crispación "que algunos han promovido" las dejen a un lado y se pase a la "cooperación leal". A su juicio, dos buenos "materiales" para hacer esa tarea son la Ley para la Autonomía personal y la de Igualdad.

De la primera, destacó que "hay que defender a la gente que no puede, y cada vez hay más". Subrayó que es una norma de gran "ambición nacional" que exige "el concurso de todos", citando también los gobiernos de "distinto signo". "Convoco al PP para que apoye y esté en el consenso, para que no le pase como en otras ocasiones" y no llegue tarde al "tren del progreso", apeló.

La otra ley, prosiguió, es "la de las cargas y los cargos"."Porque las mujeres en esta sociedad han tenido la mayoría de las cargas y ahora teniendo la posibilidad de trabajar, tienen la mayoría de las cargas y no tienen la mitad de los cargos y esto no puede seguir así", comentó. "Convoco al PP a que se sume al consenso en esta Ley, llegue a tiempo y se sienta orgulloso de poder compartir un avance hacia una España que en pocos años llevó a la mujer a la plena igualdad", indicó.

"Esta es la tarea, fortalecer la democracia, extender los derechos sociales, ganar el buen gobierno, luchar contra la corrupción, convocar a las leyes del progreso y la modernidad", dijo finalmente. Mientras que hablaba, se retiró hacia la izquierda del micrófono, lo que hizo a gente del auditorio gritar "más fuerte". "Siempre me voy a la izquierda", contestó con bromas.