Ampli.- Alonso justifica el relevo del general García González por la intención de "recorrer un nuevo tramo del camino"

Actualizado: sábado, 29 abril 2006 17:54

Villar Turrau se centrará en mantener un Ejército "moderno y eficaz" con peso internacional e impulso de la política europea de Defensa

MADRID, 29 Abr. (EUROPA PRESS) -

El ministro de Defensa, José Antonio Alonso, justificó hoy el relevo del anterior jefe del Estado Mayor del Ejército de Tierra (JEME), general de Ejército José Antonio García González, por el general de Ejército Carlos Villar Turrau por la intención de recorrer un "nuevo tramo del camino", que es "distinto" pero mantiene "la misma meta": la consecución de unas Fuerzas Armadas "cada vez más eficaces, profesionales y operativas".

"Me ha parecido oportuno el relevo para recorrer este nuevo tramo del camino, que es distinto del anterior pero persigue la misma meta: lograr unas Fuerzas Armadas cada vez más eficaces, profesionales y operativas", manifestó Alonso en su discurso, en el Ministerio de Defensa, durante la toma de posesión del general de Ejército Villar Turrau.

"Es un cambio de conductor pero no de dirección", subrayó el ministro, quien, durante el acto, agradeció al general de Ejército García González "sus aportaciones específicas para elaborar el Real Decreto de Transformación de las Fuerzas Armadas" y destacó su "larga e impecable" carrera militar.

Asimismo, tuvo palabras para el nuevo titular de la jefatura del Estado Mayor del Ejército, quien, destacó, ha ocupado puestos muy relevantes representando a España en la Agencia Europea de Defensa (EDA) y en la Organización de Investigación y Tecnología de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).

El ministro de Defensa presidió la toma de posesión del general de Ejército Villar Turrau como nuevo JEME acompañado por su secretario de Estado, Francisco Pardo, el jefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), general de Ejército Félix Sanz, y los jefes de Estado Mayor de la Armada y del Ejército del Aire, almirante general Sebastián Zaragoza y general del Aire Francisco José García de la Vega. Al acto acudieron, entre otros altos cargos ministeriales, el secretario general de Política de Defensa, almirante general Francisco Torrente, y el director General de Política de Defensa, general de División Benito Federico Raggio.

Tras la lectura del Real Decreto de nombramiento, Villar Turrau tomó posesión como jefe del Ejército con la fórmula del juramento y tras departir con las autoridades asistentes se dirigió al Cuartel General del Ejército, donde el general García González le entregó el bastón de mando del Ejército de Tierra.

Ya en el Patio de Armas del Cuartel General, ante la atenta mirada de la mayoría de los tenientes generales que integran el Consejo Superior del Ejército, una compañía rindió honores de ordenanza a los generales de Ejército García González y Villar Turrau, que posteriormente pasaron juntos revista a las tropas, por última vez en el caso del JEME saliente y por primera en el caso del JEME entrante.

Tras la transferencia de mando, llegó el turno en el Salón de Embajadores de los discursos de los jefes del Ejército saliente y entrante y del JEMAD, que presidió la ceremonia. El general Villar Turrau hizo hincapié en que el Ejército tiene que continuar con su "proceso permanente de adaptación" a los tiempos y nuevos escenarios y debe afrontar diferentes retos importantes como el ya aprobado plan de reorganización del Despliegue de la Fuerza o el desarrollo normativo de las nuevas leyes.

Incidió en que su tarea se centrará en "mirar al futuro" y conseguir mantener un Ejército "moderno y eficaz" con la misma capacidad internacional y que impulse la Política Europea de Seguridad y Defensa (PESD).

Villar Turrau manifestó su agradecimiento al Gobierno por su nombramiento y al secretario de Estado, Francisco Pardo, por haberle dejado abandonar el cargo de director general de Armamento y Material.

El nuevo JEME también reconoció a su antecesor en el cargo como el impulsor como el "autor material" de las reformas desarrolladas en los últimos años para conseguir una profunda modernización del Ejército. "Todos podemos sentirnos legítimamente orgullosos del Ejército que nos dejas", trasladó al general García González.

JEME SALIENTE

Por su parte, el general de Ejército García González aseguró que tras conocer su cese pasó una noche de insomnio preguntándose el "por qué" del relevo pero que luego comprendió que ahora debe mirar a su futuro, que se centrará en su vida personal, en su "quiniela de catorce", que son los miembros que integran su familia.

El JEME saliente expresó su agradecimiento al Ejército del Aire y la Armada por la "extraordinaria amistad y confianza" que han mantenido con él y al Consejo Superior del Ejército por toda la ayuda que le prestó. Tras destacar al Ejército como "una organización excepcional, modélica y a veces poco reconocida", indicó que en sus 46 años como militar en activo ha aprendido muchas cosas y, sobre todo, que siempre hay que mirar al futuro y "soslayar las pequeñas piedras" que puedan aparecer en el camino.

También reconoció el trabajo que ha realizado bajo su mando el Estado Mayor del Ejército, integrado por militares "leales y eficaces", y deseó suerte al JEMAD en su "difícil trabajo en estos momentos". Antes de ceder la palabra a su sucesor, le recomendó que confiara en sus subordinados porque están dispuestos a volcarse con él y concluyó subrayando que ahora su objetivo, una vez concluida su vida militar, es "conseguir la felicidad".

Cerró el turno de discursos el jefe del Estado Mayor de la Defensa, general de Ejército Félix Sanz, que transmitió al general García González que deja su puesto "con honor y honestidad", con las Reales Ordenanzas "bien cumplidas". Al general Villar Turrau le transmitió que, aunque su tarea sea difícil, siempre tendrá el apoyo "fiel" de su Estado Mayor, conformado por "oficiales de gran calidad".