La Audiencia Nacional absuelve a Aitor Herrera Vieites, acusado de atentar contra el aeropuerto de Santander en 2003

Actualizado: miércoles, 22 noviembre 2006 19:23

MADRID, 22 Nov. (EUROPA PRESS) -

La Sección Tercera de lo Penal de la Audiencia Nacional ha absuelto al presunto integrante de ETA Aitor Herrera Vieites de un delito de estragos terroristas por su implicación en el atentado contra el aeropuerto de Maliaño-Camargo de Santander cometido el día 27 de julio de 2003, por el que se pedían para el 17 años de cárcel.

La noticia de la absolución fue hecha pública esta misma tarde por el presidente del tribunal, Alfonso Guevara, cuando se celebraba otro juicio contra Herrera y otros dos presuntos etarras por los delitos de integración en organización terrorista y depósitos de armas y explosivos.

Ante la actitud mostrada por Herrera y los también acusados Asier Arzalluz y Gorka Martínez, quienes formaban un corrillo y no dejaban de charlar mientras se celebraba el juicio, el magistrado les dijo que no iba tolerar que pareciera que todos ellos se comportaran como si jugaran "a las cartas en un bar".

Como los acusados no se callaban, Guevara les recriminó "su menosprecio" y su "falta de respeto y educación" ante un tribunal que esta misma mañana había acordado absolver a Herrera en el caso del aeropuerto de Santander. Añadió que el tribunal no tendrá en cuenta a la hora de dictar sentencia la falta educación y respeto a la Administración de Justicia por parte de los procesados. Tras oir al magistrado, los acusados permanecieron callados el resto del juicio.

Fuentes fiscales señalaron que la absolución de Herrera por el atentado en Santander se debe a que el tribunal ha considerado insuficiente como prueba de cargo la declaración autoinculpatoria del acusado, ya que lo que dijo no se vio corroborado por datos objetivos, tal y como requiere la jurisprudencia del Tribunal Supremo y el Tribunal Constitucional.

Durante el juicio por estos hechos, celebrado el pasado lunes, Herrera Vieites se negó a contestar a las preguntas que le dirigió el fiscal Fernando Burgos, aunque sí respondió a su abogado, limitándose a señalar que las declaraciones que realizó ante la Ertzaintza fueron efectuadas bajo torturas y malos tratos. Además, aseguró que cuando fue interrogado posteriormente por el juez, ratificó "genéricamente" sus declaraciones policiales porque "lo único que quería era que terminara aquello".

Según las conclusiones definitivas del fiscal, Herrera estudió el aeropuerto como objetivo de ETA y facilitó la información al "comando" de ETA que perpetró el atentado. Además, el mismo día que se produjo la explosión, se reunió con los integrantes de este "comando" en una gasolinera de Bilbao.

Los etarras le entregaron dos teléfonos móviles, uno para alertar al diario 'Gara' de la colocación de los explosivos y otro para advertir al comando de cualquier contratiempo en el desplazamiento hasta el aeropuerto santanderino. El artefacto explosivo, de 20 kilos de dinamita y cloratita de "un altísimo potencial dañoso para las personas", produjo destrozos en el aeropuerto y en los inmuebles y vehículos de las proximidades.