MADRID, 26 Nov. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Congreso, José Bono, considera que la frustrada idea de convocar a un grupo de personajes del mundo del deporte, la cultura y el arte a una lectura de la Constitución con motivo de su 30 aniversario no supone "uno de los errores más crasos y condenables" porque, según ironizó, no se estaba invitando a Santa Maravillas de Jesús para que leyera nada.
En declaraciones a la Ser recogidas por Europa Press, Bono explicó esta tarde que su decisión de no celebrar finalmente con famosos el acto del próximo 5 de diciembre -- al que sí acudirán, sin embargo, 350 adolescentes de diferentes institutos madrileños-- se debió a que se presentaron "dificultades" durante su debate en la Mesa del Congreso.
Tras constatar que el problema de los españoles "hoy no es éste", el presidente de la Cámara dejó entrever que su decisión de desconvocar ese acto con famosos la adoptó con el objetivo de evitar una situación parecida a la ocurrida con la iniciativa para colocar una placa a Santa Maravillas de Jesús.
NO QUIERE ALIMENTAR POLÉMICAS
"Tengo la obligación como presidente del Congreso de no alimentar polémicas, y mucho menos entrar en ningún tipo de opiniones que pueden resultar descalificadoras", manifestó Bono, quien quiso dejar claro que, con esta propuesta, no creía que iba a molestar u ofender a nadie.
Aunque admitió que el presidente del Congreso "lógicamente puede equivocarse, y alguna vez incluso acertar", subrayó que esta vez invitar a personajes del mundo de la cultura, el deporte o el arte, a algunos de los cuales dijo haber llamado personalmente, no era "uno de los errores más crasos y condenables".
"Uno puede tener conciencia de equivocarse si ha invitado a alguien extremadamente polémico, pero en este caso no estábamos invitando a la Madre Maravillas para que se leyera algo", sostuvo Bono.
EN EL CENTRO DEL HURACÁN
El presidente del Congreso reconoció que no le agrada que se le sitúe "en el centro del huracán" y mucho menos que "algunos aprovechen para mostrar sus discrepancias y otros para atacar". A su juicio, parece que lo importante no es lo que se propone desde la Presidencia del Congreso, sino el hecho de que sea él quien lo proponga, si bien destacó que su obligación es "no perder la cabeza y aceptar lo que democráticamente se decide".
Centrándose en la polémica que surgió a raíz de la decisión inicial de colocar una placa a la Madre Maravillas en dependencias parlamentarias, Bono admitió que quizá cometió el "error" de "callar" y de no explicar desde el primer momento que detrás de ese reconocimiento no había ninguna connotación religiosa.
Preguntado por las críticas que la iniciativa de reconocer a Santa Maravillas de Jesús cosechó en el Grupo Socialista, que contrastan con el apoyo que ha recibido en el acto con famosos previsto para el próximo 5 de diciembre, Bono se limitó a agradecer el respaldo que dijo haber recibido de sus compañeros, cuya opinión considera "muy importante". "Yo soy socialista desde aquella época en la que no se podía ser, y si Dios quiere, moriré con el carnet del PSOE en el bolsillo", aseveró.
