BARCELONA, 9 Ene. (EUROPA PRESS) -
Una veintena de miembros de las juventudes de ERC (JERC) colocaron hoy ante la sede del Gobierno Militar en Barcelona una calabaza como símbolo del "suspenso" al Ejército por que el teniente general José Mena propusiera aplicar el artículo 8 de la Constitución si el próximo Estatut rebasa la Constitución.
En la calabaza había clavada una pequeña pancarta con la leyenda en catalán 'Ejército español: suspenso en democracia. JERC'. Además, los militantes desplegaron una gran pancarta: 'Respeto. Paremos el recorte. Queremos el Estatut entero. ¡Hacia la independencia!'.
No se registró ningún incidente ante la puerta del Gobierno Militar, que estaba flanqueada por dos furgonetas de Mossos d'Esquadra. Dos agentes se dirigieron a los jóvenes, ya que no habían pedido permiso para la concentración, según explicaron los propios militantes.
"DECLARACIONES PREGOLPISTAS".
El portavoz de las JERC, Pere Aragonès, defendió esta protesta "pacífica" contra las "declaraciones pregolpistas" de Mena y las consideró "los hechos más graves que ha llevado a cabo el Ejército español desde el intento de golpe de Estado del 23-F". Para él, la sanción impuesta "no es suficiente, porque no está solo en el Ejército! sino que "una asamblea importante y multitudinaria de militares españoles le ha apoyado, y eso muestra el carácter antidemocrático del Ejército".
Aragonès afirmó que las Fuerzas Armadas "tienen dirigentes que quieren que salgan a la calle para ir contra la voluntad democrática" catalana, por lo que "las actitudes franquistas y antidemocráticas del Ejército españolas continúan".
El portavoz de las juventudes republicanas afirmó que esta movilización es responsabilidad de las JERC, para pedir al Ejército "respeto a la voluntad democrática", aunque subrayó que ERC defiende también el respeto a la voluntad ciudadana.
El manifiesto del acto añade: "La única solución, ante este nacionalismo español estructural dentro de las Fuerzas Armadas, es la desmilitarización de los Països Catalans, con la retirada de los ejércitos español y francés de nuestras comarcas". Además, constata que "la raíz de esta cuestión es el mandato que la Constitución española da al Ejército, el máximo responsable del cual es el monarca".
