Colombia permite la extradición de los detenidos por el crimen, en 2009, de la calle Santaló de Barcelona

Actualizado: miércoles, 7 abril 2010 13:04

BARCELONA, 7 Abr. (EUROPA PRESS) -

Las autoridades colombianas permitirán la extradición de los implicados en el asesinato en febrero de 2009 de Félix Martínez Touriño, el entonces director general de la sociedad que gestiona el Centro Internacional de Convenciones de Barcelona (CCIB), en la calle Santaló de Barcelona, que fueron detenidos en este país en septiembre, según informaron a Europa Press fuentes judiciales.

La policía colombiana detuvo el 23 de septiembre en Cartagena de Indias al último implicado en el crimen, Said S. --pareja de la hermana del inductor--, por presuntamente ser también inductor junto a su cuñado, al contratar al asesino que disparó contra Touriño, así como a otro implicado, que supuestamente llevó en su coche al sicario.

Ayer declaró en el Juzgado de Instrucción número 18 de Barcelona, que instruye el caso, otro imputado en el crimen, un colombiano residente en Madrid que podría aparecer en algunas conversaciones telefónicas entre los principales implicados en el caso.

En declaraciones a Europa Press, su abogado señaló que tras declarar como imputado ante la juez, su cliente quedó en libertad sin fianza ni ninguna otra medida cautelar, ante lo que el letrado recalcó que "es inocente".

El crimen se produjo el 9 de febrero en la confluencia de las calles Santaló y Travessera de Gràcia de Barcelona, cuando el sicario siguió a la victima que salía de casa y le disparó en la cabeza para después salir huyendo tras abandonar el arma.

El inductor del asesinato, el ex jefe del área de audiovisuales del CCIB, Manuel M.B., su hermana, María Pilar M.B., y el sicario, Jorge Andrés M.G., que perpetró el crimen, fueron arrestados el 29 de junio y siguen en prisión provisional.

El autor intelectual del crimen de Santaló de Barcelona era un subordinado de la víctima, que ordenó que mataran a su jefe, director general de la empresa, para vengarse de éste ante la amenaza de una reestructuración que le afectaba, tras descubrir que utilizaba su puesto para sacar beneficios económicos.

En total, los Mossos d'Esquadra, en colaboración con la Guardia Civil y la policía colombiana, detuvieron por este crimen a nueve personas --cinco hombres y cuatro mujeres--, en El Prat de Llobregat, Roda de Barà, Madrid, Leganés, Parla y Seseña, así como en Colombia.