Congreso PP.- Rajoy pone la guinda a un cónclave en el que Gallardón es recibido con la canción 'Va todo al ganador'

Actualizado: sábado, 20 septiembre 2008 18:03

MADRID, 20 Sep. (EUROPA PRESS) -

El líder del PP, Mariano Rajoy, puso hoy la guinda al XIV Congreso del PP de Madrid, en el que el alcalde de la capital, Alberto Ruiz-Gallardón, fue recibido en su intervención con la canción 'Va todo al ganador' ('The winner takes it all') de ABBA, cuya letra dice "no quiero hablar sobre las cosas que nos pasaron, aunque me hace daño ahora es historia. He jugado mis cartas y tú también", además de "el ganador se lo lleva todo. El perdedor se queda pequeño junto a la victoria. Ése es el destino".

Esta melodía describe a la perfección la relación de altibajos que han mantenido en los últimos años el primer edil y la presidenta regional, Esperanza Aguirre, sobre todo a cuenta de la selección de los nombres que acompañarían a Rajoy en las listas al Congreso de los Diputados en los últimos comicios generales.

Un ejemplo de estas desavenencias se plasmó hoy en la animada discusión que presidenta y alcalde mantuvieron en el Salón Plenario antes y después de los discursos, probablemente a cuenta del último 'roce' entre ambos dirigentes por la privatización parcial del Canal de Isabel II, tema que ha flotado sobre el congreso durante todo el fin de semana aunque casi no se haya hecho referencia a él.

Mientras Gallardón fue recibido con dicha canción, ayer Aguirre llegó al Palacio Municipal de Congresos al ritmo de 'Don't bother', de Shakira, que habla de una mujer estilizada, que ha estudiado en la escuela privada, que habla francés perfectamente y que tiene los amigos perfectos.

Para introducir su discurso de candidatura, el Comité Organizador del Congreso, dirigido por Bartolomé González y encargado de seleccionar las canciones, propuso 'Mamma Mia', de ABBA, que parecía encajar como anillo al dedo al deseo de los compromisarios de que Aguirre revalidara su cargo, puesto que dice "no me puedo resistir a ti, nunca podría dejarte marchar".

La idea de sustituir la tradicional sintonía del partido por canciones de moda, al más puro estilo radiofórmula, partió del jefe de Gabinete de Rajoy, Jorge Moragas, que se inspiró en la mecánica congresual del Partido Republicano de Estados Unidos durante su visita a la convención de Minessota, tal y como explicó Aguirre.

COLORIDO EN LAS GRADAS

La jornada de hoy fue mucho más colorida que la de ayer, con banderas de diferentes países ondeando en las gradas entre insignias 'populares', y acabó con una lluvia de globos y confeti azul y plateado. Los 2.500 compromisarios invitados al cónclave acabaron llevándose del Palacio de Congresos, como si de un saqueo se tratara, todo el 'atrezzo', incluidos carteles y banderolas.

No fue lo único que se llevaron a casa los populares, porque también 'arrasaron' con la tienda de merchandising del partido. Las estrellas del congreso fueron las mantas de viaje y los pines con la cara de Esperanza Aguirre, que se acabaron el primer día, después de que ella misma los pusiera de moda.

Algunos de los 'fans' de la presidenta fueron el secretario general del partido en Madrid, Francisco Granados; el vicesecretario de Comunicación del PP, Esteban González Pons; y la secretaria general, María Dolores de Cospedal, una pequeña representación de los dirigentes que acudieron a la cita madrileña, en la que se pudo ver también a un renovado Rodrigo Rato luciendo una cuidada perilla, y al ex ministro Francisco Álvarez Cascos acompañado por su mujer, y en la que el gran ausente fue el ex presidente del Gobierno José María Aznar, de viaje en la India.

Pocos fueron los momentos en los que el auditorio se puso en pie. Si bien la presidenta consiguió arrancar los aplausos del público en más de una ocasión, el que logró más ovaciones, además de Rato, fue el presidente de Nuevas Generaciones, Pablo Casado, especialmente cuando dijo que los jóvenes del PP "idolatran a mártires como Miguel Ángel Blanco y no a asesinos como el Ché Guevara", como hace la izquierda.

MODA POPULAR

El Congreso también ha sido una pasarela en la que se han mostrado los más atrevidos diseños de la moda 'popular'. Si Aguirre cambió ayer de modelito para pasar de su chaqueta roja y falda clara de por la mañana, a un ceñido traje en tonos malva y vino por la tarde, hoy han sido otros políticos los que han marcado tendencias.

Los pantalones rojos causaron furor entre los militantes masculinos, que imitaban el estilo de Álvarez Cascos, mientras que las afiliadas se decantaron por los tradicionales trajes de chaqueta para las más mayores, y por los vaqueros y camisetas ajustados para las jovencitas. El ejemplo lo dieron las propias azafatas, a quienes la organización sugirió que vistieran con vaqueros para dar una sensación de modernidad y frescura a la cita.

A la salida del Congreso, Aguirre se encontró con su marido, Fernando Ramírez de Haro, y con sus dos hijos, que tuvieron que esperar unos minutos hasta que la masa que aguardaba impaciente a la presidenta fuera del Palacio de Congresos terminara de besarla y hacerse fotos con ella. Al más puro estilo de estrella de Hollywood, la jefa del Ejecutivo madrileño estampó su autógrafo en más de una foto suya antes de coger su coche oficial y dejar el congreso, "entusiasmada" por su éxito.