Sólo recabó el apoyo parcial de UPyD y la abstención de CC, mientras que PSOE ve "totalitarismo" y CiU avisa que así no se hacen amigos
MADRID, 13 May. (EUROPA PRESS) -
El Pleno del Congreso de los Diputados rechazó esta tarde una iniciativa del PP en la que pedían al Gobierno que garantice el principio de igualdad a todos los ciudadanos, con independencia de la comunidad autónoma en la que vivan, frente a "la imposición y el abuso" de un "nacionalismo ciego" en ámbitos como la enseñanza o el acceso a la función pública.
Esta proposición no de ley, la primera del PP en esta legislatura, sólo recibió el apoyo parcial de Unión, Progreso y Democracia (UPyD) y la abstención de Coalición Canaria, mientras que el PSOE la definió como "totalitaria" y los portavoces catalanes y vascos la descalificaron por "tramposa" y "excluyente". "No es una buena forma de hacer amigos", resumió el ponente de CiU.
La propuesta fue defendida por el ex alcalde de Vitoria y ahora diputado por el PP Alfonso Alonso, quien denunció el "arrinconamiento" que sufre el castellano en aquellas comunidades autónomas con dos lenguas oficiales, lo que provoca que, en opinión, España sea "el único país del mundo" donde "no se garantiza" la enseñanza en castellano.
"IMPOSICIÓN Y ABUSO" DE LOS NACIONALISTAS.
"En la España democrática y constitucional vuelve a darse la imposición y el abuso", aseveró Alonso, sobre todo, dijo, en comunidades como Cataluña o el País Vasco, donde "el nacionalismo ciego no defiende la diversidad, sino que disgrega la nación" en ámbitos como la enseñanza o el acceso a la función pública.
Frente a esto, el diputado 'popular' defendió que su formación aboga por que se garantice un bilingüismo "equilibrado e integrador" en las regiones que tengan lengua cooficial, de forma que "la lengua sea un instrumento de libertad y solidaridad al servicio de las personas, y nunca una fuente de desigualdades".
Asimismo, los 'populares' demandan la existencia de un cuadro de derechos de protección social con el objetivo de que "no se produzcan diferencias económicas o sociales" entre los españoles "por razón de su residencia en una u otras comunidades autónomas", y que se garantice que todos los españoles puedan tener asegurado el acceso a los recursos naturales con independencia del lugar en el que residan para superar, por ejemplo, la actual "guerra del agua".
La diputada de UPyD se mostró conforme en el enunciado de la iniciativa pero sólo apoyó la exigencia de medidas al Gobierno para paliar esta situación pues considera que en el diagnóstico del PP se han utilizado palabras que inducen a error y que debían ser corregidas, para lo cual presentó cuatro enmiendas técnicas que el Grupo Popular desechó.
PSOE: AL PP LE FALTA EVOLUCIÓN.
Por parte del Grupo Socialista, la diputada catalana Meritxell Batet recriminó al PP que "cuestione" el sistema autonómico otorgado por la Constitución con una iniciativa en la que "han malentendido" el concepto de igualdad, el cual, a su juicio, "se debe aplicar a las personas y no a las comunidades autónomas".
Es más, llegó a tachar de "homogeneizador y totalitario" el principio de igualdad que defiende el PP en su proposición. "Les falta evolución", espetó Batet a la bancada 'popular', a la que animó a que destine "la mitad de sus energías" a aplicar la igualdad de las personas allí donde gobiernan.
"¿Saben lo que es igualdad? Vertebración social y disminución de las diferencias, y de eso se ocupa el Gobierno socialista (...) porque ése sí es un principio de nuestra justificación política", añadió la diputada catalana, quien centró parte de su intervención en defender el, a su juicio, "admirado" modelo lingüístico existente en España, el cual, dijo, permite que a sus ciudadanos ser "más libres e iguales".
Por parte del grupo parlamentario de ERC-IU-ICV, el portavoz republicano, Joan Ridao, acusó al PP de llevar a la Cámara un debate "tramposo" que ya se puso sobre la mesa durante la negociación del Estatuto de Cataluña.
ERC: DEBATE TRAMPOSO.
Además, le advirtió de que la igualdad territorial que invoca su proposición no de ley no constituye "ni una limitación para las comunidades autónomas a la hora de regular derechos ni un mandato de uniformidad". Por ello, le emplazó a que retire una iniciativa que, a su juicio, se acerca "al PP más intransigente, más negador del diálogo y más manipulador".
Por su parte, los representantes del PNV y de CiU, Aitor Esteban y Jordi Xuclà, respectivamente coincidieron en reprochar al PP que vuelva a llevar al Congreso una cuestión que ya se ha debatido "50.000 veces" y que se ha convertido en "una de sus especialidades".
En concreto, Esteban echó en cara a los 'populares' que hayan iniciado el curso parlamentario en el Congreso con un discurso de construcción nacional "excluyente". "Esto de la igualdad como término está muy bien, pero si uno examina el contenido de su propuesta, lo que se busca en realidad es la desigualdad".
En este sentido, llegó a valorar como "una broma" el arrinconamiento del castellano denunciado por el PP en su intervención inicial, sobre todo porque, según argumentó, la mayoría de los estímulos que reciben de los ciudadanos son en castellano".
De su lado, Xuclà también reprobó que los 'populares' comiencen esta nueva legislatura con la que, en su opinión, se ha convertido "en una de sus especialidades: el nacionalismo de Estado". A su juicio, con la presentación de esta iniciativa, el principal partido de la oposición ha querido volver "a uno de sus clásicos: que la realidad no estropee un buen relato", a pesar de que esa realidad está basada "en la falsedad".
Tras recordar al PP que España es un Estado "plurilingüista" en la que cada una de sus lenguas merecen "el mismo respeto", Xuclà hizo uso de la ironía al considerar que plantear esta iniciativa "no es una buena forma de hacer amigos".
