SANTA CRUZ DE TENERIFE, 21 Dic. (EP/IP) -
El concejal socialista José Ángel Martín Bethencourt, miembro del colectivo Ínsula Viable, agrupación que presentó una denuncia ante la Fiscalía Anticorrupción por el caso de Las Teresitas hace más de un año, cuatro meses antes de que el propio Bethencourt se convirtiera en edil del ayuntamiento de Santa Cruz, no descarta participar en el proceso desde la acusación particular, aunque fuera de manera testimonial.
"Ya está todo en manos de la justicia, si estuviera en la acusación particular sería de manera testimonial, circunstancia que no sería para nada relevante para el asunto", señala y agrega que se da por satisfecho "con el resultado de la acción que hemos comenzado". No obstante, afirma que la decisión de ser o no acusación particular en el proceso, corresponde a la asamblea de Ínsula Viable -constituida a principios de 2005-.
Los iniciadores de este proceso fueron un grupo de amigos y ciudadanos que optaron por presentar ante la citada Fiscalía un escrito, en el que brevemente describían las presuntas irregularidades que percibían en la compra y venta de los terrenos del litoral de Las Teresitas.
La denuncia del colectivo Ínsula Viable se centraba en las supuestas anomalías hechas al amparo de un convenio urbanístico que fue, según reza en el documento de denuncia, "el pretexto perfecto para la consumación de una operación inmobiliaria con fines especulativos".
Aquel documento decía que en el expediente administrativo no se informaba del precio pagado por los terrenos, de manera que "esta omisión demuestra la intención de las partes de que no se computaran los incrementos de valor de los terrenos recalificados" que, dicen, "alcanza proporciones astronómicas". Inversiones Las Teresitas SL compró solares por valor de 5.000 millones de pesetas y luego vendió las parcelas 1 a 11 al Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife "por un total de 8.500 millones de pesetas".
En el texto de la denuncia se hace hincapié en que el préstamo que se concedió a la citada empresa fue considerado "una operación de alto riesgo" por el Banco de España, pero que "el Consejo de Administración de CajaCanarias no dudó, en ningún momento, en conceder ese crédito a la sociedad participada por uno de sus propios consejeros".
