El tribunal advierte de que la no asistencia puede dar lugar a responsabilidades disciplinarias
MADRID, 9 Ene. (EUROPA PRESS) -
La mayoría de los abogados que ejercen la defensa de los 56 acusados en el macrojuicio contra el entorno de ETA que se celebra en la Audiencia Nacional amenazaron hoy con no asistir al juicio, que se reanudará el próximo lunes, después de que el tribunal haya decidido dar una semana a las partes para que se instruyan de las diligencias número 75/89, incorporadas recientemente a la causa y que según las defensas fueron el germen del sumario que se está juzgando, el 18/98.
La letrada Arantxa Zulueta, defensora del principal imputado en este juicio, Xabier Alegría, anunció que el próximo lunes no van a comparecer, a lo que el magistrado del tribunal Nicolás Poveda respondió: "Es su problema".
Toda la polémica comenzó cuando la abogada, en representación de la mayoría de los defensores en este juicio, pidió primero la suspensión de la vista y, más tarde, tras la negativa del tribunal, amenazó con ausentarse de la misma si no disponía del tiempo suficiente para estudiar las diligencias 75/89, necesarias para interrogar a su cliente.
La presidenta de la Sala, Ángela Murillo, leyó un acuerdo del tribunal por el que se suspendía el juicio hasta el próximo lunes con el fin de que todas las partes puedan examinar la citada documentación (compuesta por 104 cajas) durante esta semana en horario de mañana y tarde. Además, advirtió a los abogados de que cuando pidan documentos de estas diligencias deben comunicar si tienen una relación expresa con el sumario 18/98, que es el que se está juzgando.
Murillo añadió que el abandono de los abogados del juicio podría dar lugar a la exigencia de responsabilidades disciplinarias, aparte de que se podrían enfrentar a una acusación de obstrucción a la justicia y de desobediencia grave, sin perjuicio de que el tribunal pueda decidir la sustitución de los abogados. Finalizada la sesión y con los magistrados ya puestos en pie, Zulueta anunció que no iban a acudir a la reanudación del juicio, el próximo lunes.
"No vamos a acudir señoría, nos vamos", dijo la abogada. Ángela Murillo le recordó que la sesión ya había terminado y que eso lo planteara el próximo lunes. Sin embargo, otro miembro del tribunal, Nicolás Poveda, señaló que la no asistencia a la vista era "su problema".
Ya en los pasillos del pabellón de la Audiencia Nacional en la Casa de Campo de Madrid, Zulueta aclaró a los periodistas que la asistencia el lunes dependerá de lo que hablen con el presidente del Consejo vasco de la Abogacía, Nazario de Oleaga, aunque insistió en que las partes deben tener una copia de las citadas diligencias, compuestas por "cientos de miles de folios", para poder interrogar a los acusados.
Al inicio de la sesión de tarde, la presidenta del tribunal, Angela Murillo, instó a la letrada a que interrogara a Xabier Alegría -el fiscal pide para él 51 años de prisión-, a pesar de que no se encontró un documento solicitado por Zulueta. La abogada se negó a interrogarle por considerar que de hacerlo se vulneraría el derecho de su cliente a la defensa y a un juicio con todas las garantías.
Además, recordó que esta mañana el decano del Colegio de Abogados de Vizcaya y presidente del Consejo de la Abogacía vasco, Nazario de Oleaga, la amparó y pidió entrevistarse con Murillo y con el presidente de la Audiencia Nacional, Carlos Dívar, con el fin de solucionar este asunto. Por ello, Zulueta señaló que, de acuerdo con la deontología profesional, no interrogaría a su defendido hasta que Murillo y Dívar se entrevistaran con su decano, ya que en caso contrario "se produciría una grave vulneración del derecho de defensa".
SUSPENSIÓN DEL JUICIO
La disputa entre la abogada y el tribunal comenzó esta mañana, cuando solicitó la suspensión del juicio por no haber podido tener un "conocimiento exhaustivo" de las diligencias 75/89 del Juzgado Central de Instrucción número 5, que sirvieron como base del sumario 18/98 instruido por el mismo juzgado, según sostienen las defensas.
Desde el pasado 29 de diciembre, las defensas han dispuesto de seis días para analizar las 104 cajas que componen el sumario 75/89, que ha permanecido secreto hasta ahora. Zulueta, además de quejarse del escaso tiempo del que han dispuesto para examinar una documentación "sin orden ni concierto", señaló que lo correcto habría sido que todos los letrados dispusieran de una copia de aquel sumario. Por ello, pidió la nulidad de las actuaciones hasta el momento del inicio de la vista oral y, alternativamente, la suspensión del juicio.
El tribunal se opuso a la segunda petición y, sobre la primera, indicó que lo resolvería en un auto. La abogada, antes de comenzar su interrogatorio a Alegría, pidió un documento relativo al "historial delictivo" de su defendido que supuestamente figura en el sumario 75/89, recientemente remitido a la Sala por el Juzgado Centra de Instrucción número 5. La vista se suspendió durante una hora y tras reanudarse, la abogada no se mostró conforme con el documento que encontró el secretario de la Sala ya que, según dijo, no se correspondía con el dossier que había solicitado para interrogar a su cliente.
La situación se repitió esta tarde, cuando Zulueta pidió conocer si iba a interrogar a Alegría ?lo que todavía no ha sucedido- con las mismas condiciones de la sesión de la mañana. De este modo, la abogada amenazó con abandonar la sala por una supuesta vulneración de los derechos a la defensa y a un proceso con todas las garantías.
El resto de abogados, salvo la defensora del acusado José Uruñuela, se adhirieron a lo planteado por Zulueta. "No continuaremos en Sala hasta que no se solucione este tema, que es el acceso más elemental a los más de mil folios nuevos incorporados al juicio", dijo el letrado Kepa Landa.
