La Ertzaintza cumple el mandato de la Audiencia Nacional y retira las fotografías de presos de ETA en Arrasate

Actualizado: jueves, 12 marzo 2009 18:47

SAN SEBASTIÁN, 12 Mar. (EUROPA PRESS) -

Agentes de la Ertzaintza retiraron esta tarde, por orden de la Fiscalía de la Audiencia Nacional, las fotografías de presos de ETA que se exhibían colgadas de la verja de una sucursal del Banco Guipuzcoano en la localidad guipuzcoana de Arrasate.

El departamento vasco de Interior confirmó a Europa Press que efectivos de la Ertzaintza acudieron a las 14.45 horas a la calle Maalako Errabala de Arrasate, donde se exhibían las citadas fotografías, destornillaron el armazón de aluminio donde lucían las mismas y en las que se podía ver a presos de la banda terrorista Unai Parot, José Ignacio Gaztañaga Vidaurreta, José Gabriel Urizar Murgoitio, María Asunción Arana y Eugenio Barrutiabengoa.

De esta forma, la Policía Autónoma Vasca ha cumplido el mandato de la Fiscalía de la Audiencia Nacional que considera que la existencia de estas fotografías constituye un delito de enaltecimiento del terrorismo y humillación de las víctimas.

En un decreto dictado hoy, el Ministerio Público abre una investigación por este asunto y ordena a la policía autónoma vasca que proceda a "la inmediata y urgente retirada" de los carteles fotográficos y "de cuantos se coloquen en lo sucesivo". A este cuerpo también le pide "practicar las indagaciones necesarias para identificar a los autores de su colocación".

Las imágenes de los reclusos de ETA que se mostraban en Mondragón, todos ellos "procesados o condenados por delitos de terrorismo", serán puestas a disposición del Ministerio Fiscal como pruebas en esta investigación.

Cabe recordar que el pasado sábado, en el acto del homenaje al ex concejal socialista en Arrasate, Isaías Carrasco, asesinado por ETA en esta localidad el 7 de marzo del pasado año, el secretario general de los socialistas vascos, Patxi López, se comprometió a hacer "desaparecer" estos carteles que homenajean a presos de ETA y a los que se refirió como "muro de la vergüenza". "No puede haber un solo espacio de impunidad en democracia para que nadie dé cobertura, aplauda o justifique la violencia", señaló.