Estatut.- CiU recalca que no renuncia a los objetivos del Estatut original y que lo intentará "por etapas"

Actualizado: lunes, 6 febrero 2006 20:05

Mas exige "cohesión" al tripartito para el referéndum y avisa al PP que no debe dar la espalda a Cataluña

MADRID, 6 Feb. (EUROPA PRESS) -

El presidente de CiU, Artur Mas, afirmó hoy en el Congreso que los nacionalistas catalanes han alcanzado un preacuerdo con el Gobierno sobre el Estatut porque consideran que es mejor que el desacuerdo, pero quiso dejar claro que no renuncian a los objetivos planteados en el texto que aprobó el Parlament y que pretenden alcanzarlos "por etapas".

En su intervención en la apertura de los trabajos parlamentarios de la reforma del Estatut, el líder de CiU aprovechó también para reclamar "cohesión" en el seno del Gobierno de la Generalitat ante la convocatoria del referéndum, habida cuenta del rechazo de ERC al pacto que defienden el PSC e ICV, y para advertir al PP que, si quiere gobernar en España, no puede "dar la espalda a Cataluña".

Según explicó, el vigente Estatuto había dejado a Cataluña, 25 años después de su aprobación, "lejos de las aspiraciones y necesidades de autogobierno", y por ello una serie de formaciones catalanas se unieron para presentar un proyecto "ambicioso" de reforma que fue aprobado por más del 90 por ciento del Parlament, lo que a su juicio debería hacer reflexionar a quienes lo descalifican.

ZAPATERO PROMETIÓ NO TOCARLO

Recordó que pese a "los reiterados compromisos de altas instancias del PSOE", como el propio José Luis Rodríguez Zapatero, acerca de que la reforma se aceptaría como se aprobase, se abrió una negociación que ha acabado con un preacuerdo porque, en su opinión, los nacionalistas siempre suscriben un pacto cuando es mejor que el desacuerdo, y porque entendían que Cataluña no podía "permitirse el lujo" de que todo el proceso quedara en nada.

Para ratificar en la práctica ese preacuerdo alcanzado en Moncloa, indicó que debe comprobarse que no hay "marcha atrás" en los compromisos políticos adquiridos a lo largo de la negociación y que se mantiene "en toda su precisión" lo referido a la inclusión del término 'nación' en el preámbulo y a los aspectos "clave" de la financiación. "Si esto es así, y acaba bien, como esperamos, nuestro compromiso adquirirá el carácter de definitivo".

Ahora bien, Artur Mas aseveró que el apoyo de CiU a ese preacuerdo no significa que los nacionalistas catalanes renuncien a los objetivos que en su momento quedaron marcados en el Estatut que el Parlament aprobó el 30 de septiembre de 2005. "Ahí se puede llegar de un salto o por etapas, e inevitablemente será por etapas", zanjó.

También aprovechó su discurso para criticar de soslayo al tripartito y las discrepancias entre PSC y ERC en torno al preacuerdo alcanzado. Artur Mas señaló que la reforma estatutaria no termina en las Cortes, sino en el referéndum que habrá de celebrarse en Cataluña y para ese momentos considera que "será necesario" que el gobierno de la Generalitat "actúe con el grado de cohesión" que se requiere.

Por último, lanzó una advertencia al PP, con quien los nacionalistas gobernaron en la primera legislatura de José María Aznar y que ahora se hallan muy distanciados. Mas argumentó que CiU ha sido clave para sacar adelante el Estatut pese a estar en la oposición en Barcelona y en Madrid, e invitó a los 'populares' a tomar ejemplo.

CON RABIA NO SE CONSTRUYE NADA "Aun estando en la oposición, se puede hacer un buen servicio al país y quisiera invitar a aquellos que ven esto de forma hostil --aconsejó--. Desde la intransigencia y desde la rabia no se construye nada, y quien quiera gobernar España, no puede dar la espalda a Cataluña".

Por su parte, el secretario general de CiU, Josep Antoni Duran i Lleida, que será el ponente de los nacionalistas por parte del Congreso, se mostró convencido de que el estatuto resultante será "bueno" para España y para Cataluña, y a tal fin se comprometió a aportar "sentido común" y "pedagogía".

Tras repasar los momentos en que su formación ha apoyado al Gobierno central, de uno u otro signo político, lamentó que se esté utilizando a CiU o las legítimas aspiraciones de Cataluña para "erosionar" al Gobierno, algo que no le sorprende porque no es la primera vez que ocurre.

Finalmente, expresó su deseo de que el Estatut acabe teniendo "el máximo consenso posible", tanto de aquellos que lo apoyaron en el Parlament y que saben que el texto "también es de ellos", en alusión a ERC, como por parte del PP, a los que espera convencer a lo largo de la tramitación.