MADRID, 28 Nov. (EUROPA PRESS) -
Izquierda Unida-ICV ha registrado 41 enmiendas al proyecto de reforma del Estatuto balear en el Congreso, que recogen las propuestas de la coalición en las islas, Esquerra Unida-Els Verds. El grupo espera poder negociar alguna de estas iniciativas y llegar a votar a favor del texto.
La postura de IU-ICV dependerá de cómo transcurra el debate en comisión, según explicó a Europa Press el portavoz en el Parlamento balear de Esquerra Unida-Els Verds, Miquel Roselló, quien confirmó que la coalición no votará en contra. La elección entre la abstención y el voto a favor, dependerá del resultado de la discusión parlamentaria.
Entre las enmiendas, el grupo presenta la redacción nueva de dos títulos, el derechos, deberes y libertades (Título II) y el de financiación (Título VIII), así como cambios en el capítulo de Justicia. Roselló explicó que si se admite alguna de las iniciativas sobre el primero de los títulos, así como sobre las competencias de las Islas Baleares, el grupo podría retirar el resto de las propuestas y sumarse al acuerdo. "Seguiremos insistiendo", aseguró.
Respecto al capítulo de la financiación, la coalición de izquierdas propone un sistema nuevo para la Comunidad Autónoma, "que se asemeja más al de un Estado federal". El diputado aseguró que retirarían esta iniciativa de llegar a un acuerdo en otros capítulos, puesto que se trata de "un planteamiento maximalista", reconoció.
Entre otras enmiendas, IU-ICV propone una nueva redacción para el artículo 1, en el que se define a las Islas Baleares como nacionalidad histórica que se constituye en Comunidad Autónoma. "Los pueblos de las Islas de Mallorca, Menorca, Ibiza y Formentera, en función de su carácter de nacionalidad histórica y en el ejercicio de su derecho al autogobierno, se dotan del presente Estatuto político", propone la coalición de izquierdas.
También quiere IU-ICV sustituir el artículo 4 para regular el catalán como lengua propia y oficial de las islas, que "tienen el deber de conocer y el derecho de usar" los ciudadanos, que será la "lengua de uso en las instituciones y administraciones públicas" y fomentado por estas.
Roselló concluyó que su partido está abierto al acuerdo y que decidirá el voto final en las Cortes de acuerdo con las enmiendas que pueda introducir. "Defendemos un Estatuto mejor, pero éste mejora sustancialmente lo que hay, aunque lamentamos que no sea más audaz", concluyó el portavoz.
