MADRID, 11 Feb. (EUROPA PRESS) -
La presidencia de Colectivo de Víctimas del Terrorismo del País Vasco (COVITE), Cristina Cuesta, afirmó hoy que "a su padre lo mataron tres veces", una cuando le quitaron la libertad, mientras vivía amenazado y con escoltas, la segunda "cuando lo mataron físicamente" y la tercera con las "mentiras e injurias de la gente, que decían que 'algo habría hecho', y parte de la sociedad lo creyó".
Cuesta se expresó así durante la primera sesión del juicio celebrado en la Audiencia Nacional contra el etarra José Antonio Zurutuza Sarasola, alias 'Acuyo', presunto asesino del delegado de Telefónica en Guipúzcoa, Enrique Cuesta Jiménez, padre de Cristina, y su escolta, el agente de la Policía Nacional Antonio Gómez García, el 23 de marzo de 1982. Agregó que "la familia Costa Gorostidi ni olvida, ni perdona".
Al comienzo del juicio, la mujer y la hija del directivo de Moulinex José María Latiegui, que fue asesinado por ETA el 14 de abril de 1981 en Usurbil (Guipúzcoa), presuntamente por 'Acuyo', fueron expulsados de la Audiencia por el presidente de la Sala de lo Penal, Javier Gómez Bermúdez, después de que exhibieran carteles con la fotografía de la víctima en la que pedían "justicia" por haberse considerado que su caso había prescrito.
Costa recordó que su familia, antes del atentado, vivía con el "temor" de que su padre fuese asesinado, tal como sucedió con su predecesor en el cargo un año y medio antes. Relató que el día del atentado, llamaron a su casa y le dijeron que "bajasen inmediatamente" a la calle porque a su padre le había pasado "algo". "En seguida supe que era un atentado", subrayó.
Explicó que insistió en el hospital y le enseñaron el cuerpo "con un disparo en el corazón", mientras que el otro fallecido murió de un disparo en la cabeza y otro en el hombro.
'ACUYO' NIEGA LOS HECHOS
Por su parte, 'Acuyo', negó los hechos en su totalidad y aseguró que desde 1980 vivía en el País Vasco francés, que se desplazó a Panamá y Méjico, pero "nunca" a España hasta 1989. Añadió que en Francia "siempre" mantuvo una vida pública y que hasta 2004 no fue detenido por esta causa.
Declararon también como testigos los etarras Joaquín Zubeldía y Francisco Javier Taberna, ambos juzgados y condenados por esos hechos, que habían implicado a 'acuyo' con sus declaraciones al ser detenidos tras el atentado. En esta ocasión, sin embargo, se desdijeron de sus palabras.
Otra etarra implicada en el atentado, María Arantzazu Carrera será citada a declarar mañana por compartir vivienda con Zubeldia. También serán llamados como testigos seis guardia civiles y policías que no pudieron ser identificados porque no aparecen en la base de datos actual del Cuerpo.
Mañana continuará el juicio en el que el fiscal Daniel Campos imputa al etarra dos delitos de asesinato terrorista, por los que solicita 30 años para cada uno. Además, pide que se acuerde la prohibición del procesado a aproximarse o comunicarse con los familiares de las víctimas durante cinco años después del cumplimiento de la pena.
Una vez concluido el juicio, el presidente de la Sala de lo Penal de la Audiencia, emitió un comunicado recordando a los medios de comunicación que "al incumplirse las instrucciones sobre emisión de imagenes en el juicio, se han tomados algunas del público cuya difusión puede afectar a los derechos fundamentales de las personas que estaban presenciando la vista, por lo que su emisión será de la exclusiva responsabilidad del medio que las difunda".
