Pide no convertir el "diálogo en gritos" y confirma que estará el sábado con la AVT y que será candidato en Madrid
MADRID, 7 Jun. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, aseguró esta tarde que la 'ruptura' de relaciones entre el Gobierno y el PP es "reversible" siempre y cuando el jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, "rectifique", aludiendo a la próxima reunión que el PSE-EE quiere celebrar con Batasuna. Durante su intervención en el Foro ABC, defendió además que su partido no caiga en el "radicalismo" de izquierda ni en planteamientos sectarios "que convierten el diálogo en gritos".
A su juicio, el culpable de la nueva situación es Zapatero, puesto que ha sido él quien ha actuado "al margen" de lo acordado en el Congreso de los Diputados, al dar su beneplácito a un encuentro con representantes de la ilegalizada Batasuna.
No obstante, insistió en que la actual coyuntura política --Mariano Rajoy proclamó ayer en Las Cortes que rompía relaciones con el Gobierno-- es "reversible" si el presidente se ciñe a cumplir con el mandato recibido. También avisó de que es difícil negociar con quienes tienen las armas "debajo de la mesa", puesto que pueden volver a utilizarlas si lo alcanzado en la negociación no cumple sus expectativas.
Según Ruiz Gallardón, si el Ejecutivo socialista acierta en sus planteamientos, España podrá tener cotas de seguridad y confianza de las que antes nunca había gozado. Pero si no acierta, advirtió, su equivocación tendrá consecuencias para el conjunto de la Nación. Con estos argumentos, incidió en que es necesario hacer bien las cosas para que esta generación, "que ha sufrido más que nadie por el terrorismo", no siga teniendo este problema en el futuro. En este contexto, confirmó que estará presente en la concentración que ha organizado la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), el próximo sábado, en Madrid.
En cuanto a la presencia en el país del líder del Sinn Fein, Gerry Adams, el regidor madrileño hizo hincapié en que el modelo de sociedad que defiende éste no es válido, bajo su punto de vista, para los españoles.
HAY QUE SER "MODERADO" PARA RECUPERAR GOBIERNO
En lo que concierne a su partido, estableció que para recuperar el Gobierno de España es necesario que los 'populares' presenten un discurso "moderado y centrista", que resulte "opuesto" al del Ejecutivo y con la vista situada en el futuro. Cuando se planteó el tema de las últimas elecciones generales y los hechos que acaecieron alrededor de aquellas fechas, dijo que hay que lograr sustituir al PSOE en La Moncloa por los errores que hayan cometido a partir de aquel día y por haber "dilapidado" esa confianza popular.
Agregó que, con ese fin, el PP debe presentar propuestas de futuro, apoyadas en ideas y avaladas por sus distintos equipos de gestión. "Es necesaria la moderación --determinó--, porque desde ella es creíble el discurso político. Nuestra obligación es denunciar errores del Gobierno y no recurrir únicamente a revisiones históricas".
En otro momento de su discurso, el regidor de la capital abogó por que su formación política no no caiga en el "radicalismo" de la izquierda ni en planteamientos que puedan parecer "sectarios" y que conviertan "el diálogo en grito" puesto que, a su entender, quien tiene ideas las debate con sus adversarios.
CANDIDATO "SEGURO" AL AYUNTAMIENTO
En lo que concierne a su futuro, apuntó que es "seguro" que repetirá como candidato del PP al Ayuntamiento de Madrid en los comicios locales del próximo año y que desempeñará las funciones que Rajoy le encomiende. Precisó que tanto él como Esperanza Aguirre quieren ganar las citas electorales de 2007 para continuar la transformación de la ciudad de Madrid y de la Comunidad y, además, para abrir el camino del presidente 'popular', Mariano Rajoy, a la Presidencia del Gobierno de España.
En su opinión, el país necesita un cambio y los ciudadanos tienen que volver a confiar en las instituciones del Estado, y puso como ejemplo "la posición retraída y secundaria que España ocupa ahora en la escena internacional". "Ello -prosiguió- no debe hacernos olvidar el nivel de protagonismo que alcanzó España en la etapa anterior", en clara alusión a los ocho años de los gobiernos presididos por José María Aznar.
